Esta época nos permite planificar y plantear tareas que pueden realizarse porque en el desarrollo de la generalidad de las especies comienza su período de letargo. Con respecto al suelo no sucede lo mismo ya que todavía podemos realizar enmiendas. En cuanto al césped, estamos a tiempo de resiembras y relleno de pozos provocados por la acción del riego. Lo cierto es que en las ediciones anteriores brindamos datos útiles de cómo empezar de cero. Proponemos darte esta guía para que cuentes con los trabajos que se realizan en otoño en un espacio verde.
1- Sembrar herbáceas perennes:
Las que se siembran en esta estación serán más robustas, las de primavera y que además florecerán este año, como por ejemplo: gaillardia, no me olvides, amapola, espuela de caballero, gaura, entre otras. Las anuales de asiento también se siembran ahora antes que la tierra pierda calor, por ejemplo arvejillas, alelí de mahón, caléndula, coquetas y allisum. Debes conservar las semillas de herbáceas anuales. Recoléctelas al mediodía de una jornada fresca para que sequen rápidamente. Use bolsas de papel oscuro, coloque el nombre a cada variedad y hasta las puede identificar por color. Recuerde que las variedades modernas rara vez dan plantas idénticas a la planta madre cuando se reproducen por semillas recolectadas, por lo general las plantas que se obtienen son inferiores en tamaño y calidad. Si quiere obtener plantas idénticas, deberá adquirir las semillas cada año.
2- En los canteros:
Debemos realizar las siguientes tareas:
- a) Sacar de raíz las herbáceas enfermas para evitar que contaminen a las demás plantas.
- b) Limpiar planta por planta, quitar las flores marchitas, las hojas secas y la gramilla entremezclada. Tener cuidado de no dañar con la pala los bulbos de primavera que permanecen en el cantero.
- c) No podar las gramíneas, la hortensia y el sedum. Incluso, secos tienen gran valor ornamental.
3- Cambiar el régimen de riego:
Regar a la mañana temprano o al atardecer y disminuir los riegos a medida que cede el calor. Es importante controlar la humedad ambiente.
4- Planificar los nuevos canteros:
Comenzar a preparar la tierra quitando malezas, nivelando, aireando y si es necesario agregando materia orgánica o compost.
5- Realizar la plantación de bulbos:
Nos referimos a los bulbos de floración invierno – primavera, estos se cultivan a mediado de abril. Alguno de ellos son: anémonas, fresias, jacintos, marimonias, narcisos, alstroemerias, tulipán, etc. Guarde en un lugar fresco y seco los bulbos de floración estival, para plantarlos en julio.
6- División de matas:
Si es necesario dividir las herbáceas. Así obtenés nuevas plantas a partir de la separación de matas, por ejemplo: calas, agapantos, hemerocalis, achileas, ásters y salvias. Una vez separadas cuando se plantan, volver a abonar. Esta tarea se realiza antes de las heladas.
7- Resiembra otoñal:
El césped en otoño comienza a amarillear , a algunas de las variedades que les ocurre esto son: bermuda, las gramillas híbridas y el kikuyo, entre otras. Muchos desean ver verde todo el año, por tal razón es que antes de que comiencen los fríos se realiza la resiembra otoñal. Las semillas utilizadas para tal fin tienen ciclo otoño – invierno, como el rye grass anual o el perenne. Lo ideal es mezclar rye grass anual y perenne en una proporción de 4 a 5kg por cada 100m cuadrados. Fertilizar con fosfato diamónico. En esta época también se realizan las nivelaciones del terreno. Donde haya pozos debe ser rellenado.
A fines del otoño
- Comenzar con los trasplantes: Se realizan los trasplantes de arbustos y árboles de hoja perenne. También se plantan a raíz desnuda los de hoja caduca, fines de mayo, como los sauces y álamos.
- Plantaciones: No plantar las especies sensibles a las heladas, se recomienda hacerlo en primavera cuando bajan las temperaturas, por ejemplo: los jacarandás, lapachos, palos borrachos, acacias, entre otros. Estos se hielan y mueren con facilidad cuando son pequeños. Las otras variedades de árboles no tienen problemas de cultivo.
- Trasplantar coníferas: En los trasplantes se deben recortar las raíces en la mitad de la proyección de la copa. Realizar esta tarea antes de que se enfríe el suelo.
- Realizar podas de limpieza: Estas se efectúan en los rosales, sacando las ramas secas y enfermas, teniendo especial cuidado con la floración de otoño del rosal. También hay que dejar las flores pasadas, especialmente de los rosales antiguos, porque sus escaramujos (frutos) son muy decorativos.
- Podas: Solo de las ramas que ya florecieron y las viejas de geranios y malvones.
- Limpieza de enredaderas: Sobretodo las que florecieron en verano, como los jazmines.
- Trasplantes en macetas: Las especies que crecieron y necesitan cambio de maceta para un mejor desarrollo. La tierra que se agregue debe ser una buena mezcla con materia orgánica o humus de lombriz o compost.
- Abonar: Se recomienda colocar en las jardineras compost, antes de que lleguen los fríos.
- Limpieza: Las podas de limpieza se realizan en todas las especies de un jardín. Retirando ramas secas, quebradas y enfermas. También deben revisarse las guías o tutores y cambiar los que no estén en buen estado o mal ubicados.
- Poda: Es conveniente no retrasar la poda de los cercos de ligustrina, abelias y laurentinos, así se da tiempo al rebrote.
- Compost: Se pueden aprovechar las hojas de robles y castaños para acidificar los canteros, siempre se recomienda triturarlas. Esto es bueno cuando no tienen enfermedades.
- Especies : Algunas especies poco resistentes, deben mantenerse en lugares protegidos contra los fríos fuertes y heladas. Algunas de ellas son: alegrías del hogar, geranios y aljabas.
- Los bulbos de dalias: Pueden dejarse en la tierra, si necesita dividirlos hágalo después de la primera helada. Si se extraen de la tierra guárdelos en un lugar seco hasta la primavera.
- Fumigar: En los períodos y frecuencias que nos indican los profesionales , es época de pestes y enfermedades.