La ciencia demostró más de una vez que cuando los adolescentes miran demasiada televisión el riesgo de padecer obesidad aumenta. Sin embargo, en los últimos años, el escenario cambió: lo que creció significativamente es el tiempo de exposición a una multiplicidad de pantallas, que incluye tabletas, smartphones, computadoras y videojuegos. El impacto de estos nuevos hábitos recién empieza a ser investigado: un nuevo estudio publicado por The Journal of Pediatrics advierte que los chicos que dijeron pasar más tiempo expuestos a diversas pantallas incurren en hábitos que aumentan en gran medida el riesgo de obesidad.
Para este estudio, investigadores de Harvard T.H. Chan School of Public Health analizaron datos de 2013 y 2015 del Sistema de Vigilancia de Comportamiento de Riesgo de los Estados Unidos que incluyó a 24.800 adolescentes de entre 14 y 18 años. Los científicos encontraron que casi el 20% de los adolescentes pasa más de 5 horas por día en smartphones, tabletas, computadoras y videojuegos, comparado con sólo 8% que mira más de 5 horas de TV por día.
Asimismo, los investigadores hallaron que los adolescentes que pasaban más de cinco horas en los dispositivos son 43% más propensos a sufrir obesidad en comparación con los adolescentes que no pasan ese tiempo con los dispositivos. Y además, son dos veces más propensos a beber una bebida azucarada por día, así como a no dormir lo suficiente o a realizar insuficiente actividad física.
La exposición de los chicos a la tecnología es una tendencia mundial. En Argentina, una encuesta nacional publicada en agosto determinó que 7 de cada diez adolescentes de entre 13 y 17 años está gran parte del día conectado. El dato surge de la "Encuesta nacional de consumos y prácticas culturales entre adolescentes" que llevó a cabo la Asociación de Diarios del Interior de la República en todo el país y que reunió las respuestas de 1.800 adolescentes de capitales provinciales y ciudades grandes como Rosario o Bahía Blanca. Esta misma encuesta, hace 10 años, había dado como resultado que 7 de cada 10 adolescentes se conectaba apenas 30 minutos por día.