Si hay un lugar en la casa donde se pasa gran parte del día es la cocina. Allí se realizan gran parte de las actividades cotidianas como guardado, preparado, cocción de alimentos, sin contar que es el lugar donde muchas familias desayunan, almuerzan y cenan. Se podría decir que es el corazón de la casa. Por todos estos motivos es fundamental tener en cuenta al momento de hacerla o remodelarla la distribución de los muebles, la iluminación, el decorado y todo aquello que permite que sea un lugar funcional.

Antes de emprender cualquier modificación siempre hay que pensar en qué actividades le gustaría desarrollar en la cocina, o anexas a ella ya que nadie puede negar que éste también puede ser un lugar para mirar tele, usar la notebook, revisar papeles, entre decenas de cosas más. De ser así se deben planificar las áreas para cada una de estas actividades.

En primer lugar hay que revisar el tipo y estilo que se le quiere dar que puede pasar por el tradicional de madera, rústica tipo country ingles, línea blanca, moderna con acero y vidrio, económica, abierta tipo loft, con una isla, entre otras. Claro que esto también estará directamente vinculado al estilo general de la casa.

En segundo lugar, hay que pensar como será equipada. Cada artefacto necesita instalaciones especiales; cada marca tiene dimensiones propias, considerar si quiere anaffe y horno elevado o unificado en un único artefacto. Pensar en el microondas, lavavajilla, extractor, grifería, entre otros artefactos.

Otro detalle que no es menor, es el vinculado con el mantenimiento ya que un acabado en madera delicada requerirá un esfuerzo superior para lucir adecuada, mucho vidrio o estantes abiertos también.

Un buen diseño demanda habilidad en el manejo de los espacios para que sea una cocina funcional. Así es que se debe respetar una "línea de proceso", que tenga en cuenta las tareas en el orden en que éstas se realizan.


Todo en orden


* Definir las zonas de cocción, de lavado y de preparación de alimentos, formando el "triángulo de trabajo". Definir las dimensiones mínimas para trabajar sin sentirse incómodo.

*En cocinas pequeñas aprovechar todo el espacio posible, desde el suelo hasta el techo.

* Si la cocina lo permite, incorporar un comedor o barra desayunador dentro de la cocina. Esto permitirá integrar la familia mientras se cocina o como alternativa al comedor principal de la casa.

* Si se empieza de cero, es aconsejable que la cocina esté junto al jardín para disfrutar de una zona exterior para las comidas veraniegas. También debe tener acceso directo o cómodo con el garaje o estacionamiento para descargar las compras.

* Un detalle infaltable al construir de cero la cocina: colocar suficientes tomas de electricidad bien distribuidos y proveer al ambiente de suficiente luz natural.

* Para agrandar visualmente la cocina se pueden utilizar muebles sin puertas y con los objetos a la vista, siempre que no resulte poco práctico.

* También se puede colocar placas de acero inoxidable en las paredes sobre la mesada, actuando de espejo. Amplían el espacio, son un material excelente para la cocina (resisten el calor y el agua) y proveen sensación de higiene.

* Si el espacio lo permite siempre es ventajoso disponer una zona libre junto a la zona de cocción para servir los platos.

* La mejor opción para cocinas largas y estrechas, con puertas en los extremos, es disponer las zonas en las paredes laterales.


Iluminación


* La distribución de las áreas de la cocina, siempre que sea posible, deben poder adecuarse a la iluminación natural. Buscando una buena orientación entre ventanas y mesadas puede dar con un diseño correcto y funcional.

* Evitar que las ventanas queden detrás del área de trabajo. Esta situación proyectará sombras y obligará a utilizar frecuentemente luz artificial.

* La mejor distribución es ubicar las áreas de trabajo, principalmente la pileta, debajo de una ventana. Es importante tener en cuenta evitar el deslumbramiento en caso de sol directo, controlando el ingreso de luz con cortinas.

* La iluminación artificial puede dividirse en general, puntual o localizada. Con una luz general se logra un ambiente bien iluminado, disponiendo la puntual para las áreas de trabajo que lo requieran.


Más detalles


* Los mejores pisos son los resistentes a las manchas, la grasa y la humedad. La madera y los pisos porosos son poco convenientes dentro de la cocina. La elección de materiales para pisos y paredes es una de las claves en el diseño.

* En la elección de muebles el material es uno de los temas prioritarios. Los muebles de madera natural deben tener un tratamiento especial para facilitar su limpieza y alargar su vida útil. Pueden estar patinados o laqueados. Los laminados plásticos o de melamina son de fácil limpieza pero poco resistentes al agua si se moja en su interior. Algunos imitan muy bien la madera. Las superficies de acero inoxidable o vidrio, son fáciles de limpiar, resistentes y durables. Para su mantenimiento se utilizan limpiadores especiales pues de otro modo podrían rayarse.

* Aunque la mayoría de las cocinas tienen todos sus muebles empotrados, se puede diseñar una cocina pensando en muebles sueltos: un biblioteca o viejo armario utilizado para almacenamiento de alimentos, una mesa de madera utilizada como área de preparación de alimentos, etc.

* Incorporar superficies de trabajo que puedan deslizarse hacia afuera, como mostradores, tablas para cortar el pan y tablas en general. Es más fácil alcanzar las cosas en cajones con guías extensibles, que les permitan salir del todo. El uso de estantes giratorios para esquinas del bajo mesada es una solución cómodo y que permite mayor capacidad de guardado.

Fuentes: Estilo ambientación y arquitectonline