El cepillado en seco no solo es para el pelo. Los expertos capilares siempre aconsejan que es mejor desenredar el cabello antes de lavarlo y también que no debemos cepillarlo hasta que no esté seco del todo porque el folículo está más débil cuando el pelo está mojado y podemos hacer que se quiebre. Ahora sabemos que esta técnica del cepillado en seco (o dry brushing) también puede hace maravillas por nuestras piel.
La clave es simple: si quieres una piel más luminosa y firme, antes de hidratarla debes exfoliarla. Consíguelo con un cepillado corporal en seco.
Este paso de tu rutina de belleza te llevará muy poco tiempo para los beneficios que obtendrás: reduce la celulitis; limpia los poros y elimina la piel muerta; evita los pelos enquistados; prepara la piel para tratamientos como autobronceadores; mejora el sistema linfático eliminando toxinas; exfolia; reafirma; y sí, también alivia el estrés y ayuda a dormir mejor. Y conseguirlo apenas te llevará unos minutos.
Aunque ahora está de moda, está técnica se usa desde hace siglos. La mejor forma de practicarlo es hacer movimientos repetitivos (de 3 a 6 veces) y siempre de una extremidad a otra con el cepillo seco. Comienza por los dedos de los pies hasta el tobillo; de tobillos a rodillas, siempre en sentido ascendente; sigue por los muslos, glúteos, caderas y abdomen. En estas tres últimas partes del cuerpo realiza movimientos circulares para estimular la microcirculación.
En brazos, igual, movimiento ascendentes. Y en la espalda realiza movimientos de la columna vertebral hacia fuera, ve subiendo del sacro hasta las cervicales.
El proceso es muy simple y solo necesitas un cepillo de cerdas naturales, con cerdas de agave y puntas redondeadas para evitar los arañazos, ya que este el único que es capaz de estimular la piel sin irritarla, el equilibrio perfecto entre firmeza y suavidad.
Hay quien añade unas gotitas de aceite corporal al cepillo, no es una mala idea. Y si aguantas el agua fría, humedece una toalla en al agua que habías recogido antes de la ducha y frota el cuerpo con ella, haciendo el mismo recorrido que con el cepillo.
Fuente: Diez Minutos