Aprender a respirar es muy importante ya que toda la vida está sustentada por la respiración. Se hace desde que se nace, incluso la respiración se hace antes de pensar. Se puede vivir varios días sin comer, ni dormir, pero no se puede vivir más de unos minutos sin respirar. La respiración es la fuerza vital y de allí surge la importancia de aprender a hacerlo de la mejor manera. Para meditar, concentrarse o relajarse, pocas cosas hay tan efectivas como los ejercicios de respiración, ya que con unos minutos diarios se puede conseguir resultados asombrosos. Algunos de ellos son los que a continuación se detallan:
Respiración inferior o abdominal
Extendido sobre la espalda, sentado o de pie, se inhala lentamente por la nariz y se conduce el aire al vientre y el estómago, para después exhalar también por la nariz. Si se ejecuta bien esta respiración, al inhalar se dilata el estómago y al exhalar vuelve a la posición de partida. La práctica se puede hacer de 5 a 10 minutos.
Media o intercostal
Se puede hacer estando en una posición extendida, sentado o de pie. Se inhala lentamente por la nariz para llevar el aire a la zona media del pecho, hacia los costados. Exhalar después en el mismo tiempo también por la nariz. Si se realiza bien esta respiración, al inhalar se ensancha la zona media del pecho, que vuelve a la zona de partida al exhalar. La práctica es de 5 a 10 minutos.
Alta o clavicular
Extendido, sentado o de pie, inspirar con lentitud por la nariz para trasladar el aire a la zona más alta del pecho, hacia las clavículas. Exhalarlo en el mismo tiempo por la nariz. Si se efectúa bien esta respiración, al inhalar se dilata todo el tórax, en tanto que el vientre desciende hacia la espina dorsal. Se puede practicar de 5 a 10 minutos.
Estos ejercicios también pueden ejecutarse caminando por un parque o plaza con buena arboleda . Hay que irse acostumbrando a tomar aire tanto como se pueda, sin forzar, y a exhalarlo por completo, porque así se renueva completamente y aumenta la capacidad pulmonar. Cuando la persona se se ha habituado a estos ejercicios, puede comenzar a practicar otros un poco más completos.
Completa o integral
Inhalar el aire lentamente por la nariz y llevarlo en primer lugar al vientre y el estómago, continuar inspirando sin interrupción y conducirlo hacia la zona media del pecho. Proseguir inspirando sin interrupción y llevarlo a la zona más alta del tórax. Después expulsar el aire por la nariz en el mismo tiempo que se tomó. Si se hace bien esta respiración, al inhalar se dilatan primero el vientre y el estómago, y después todo el tórax.