En el medio de la ola de calor que azota a casi la mitad del país y de las alertas meteorológicas por temperaturas extremas en varias provincias, no pueden faltar los consejos para mantener fresca la casa y aliviar el agobio en los hogares.
Dejar la casa a media luz, no abrir las persianas o cortinas hasta la tardecita, humedecer los pisos de baldosa y cocinar sin prender el horno son algunas de las clásicas sugerencias que ayudan a generar ambientes refrigerados y propicios para trabajar o disfrutar en familia. Además, la arquitecta Florencia Servente, creadora del emprendimiento Mamá Arquitecta, señala otros trucos para mantener el calor al margen.
Cuándo ventilar y cuándo cerrar las ventanas
“En las horas de mayor temperatura, cerrá las ventanas y cortinas para que el calor no ingrese a tu casa”, aconseja la arquitecta Servente.
Si las ventanas tiene persianas se pueden dejar las ventanas abiertas pero con las persianas bajas sin llegar al tope ni cerrarla por completo para que quede un espacio libre y que el ambiente se mantenga “oscurito” y fresco.
La casa debe ventilarse bien temprano, al alba, o de nochecita, cuando ya bajó el sol. Al hacerlo, lo mejor es lograr una ventilación cruzada, para crear corrientes de aire que faciliten la tarea de refrescar el hogar.
A la hora de ventilar, otro consejo es rociar las cortinas con agua. El aire que ingrese a la casa se enfriará al pasar por las telas humedecidas. Servente también recomienda la instalación de burletes en puertas y ventanas, para evitar que entre el calor (y en invierno, el frío).
Ventilador y hielo: un viejo truco poco conocido
Sin un aire acondicionado como aliado, bien vale hacerse de un ventilador. Para enfriar el aire que genera, lo ideal es ubicarlo lo más cerca posible del suelo (porque el calor sube). Hay que considerar este dato a la hora de elegir qué electrodoméstico comprar: si un turbo que se apoya en el piso o un ventilador de techo.
Otro tip para “enfriar” el aire es colocar un recipiente con hielo delante del ventilador, lo que promete generar una brisa más fresca.
Pisos frescos, casa fresca
Los pisos de baldosa, cerámica o cemento pueden refrigerarse, mojándose cada cierto tiempo. Un trapo húmedo bastará para generar un ambiente más fresco.
El mismo tip vale para los patios, que podrán regarse -con la debida moderación y sin desperdicio de agua- cuando amanece y cuando baja el sol.
En los patios también pueden generarse espacios con sombra, para que el sol no castigue tan fuerte. Vale recurrir a lonas, velas, cañas y toldos. Lo mejor siempre será la sombra natural de árboles, pero no en todos los patios es posible.
Las plantas, grandes aliadas
Si tenés plantas de interior, es bueno colocarlas cerca de las ventanas, para generar sombra en el interior de la casa. Humedecer la tierra de las macetas también contribuirá a templar un poco el ambiente.
Con aire acondicionado
El mejor aliado para enfriar el hogar, señala la experta, es el aire acondicionado. Colocar el aire entre 22 °C y 25 °C maximizará su rendimiento y asegurará un clima agradable dentro de casa. Es clave mantener sus filtros limpios, la recomendación es hacerlo cada tres meses.
No es eficiente establecer la temperatura del aire en frío extremo, porque el aparato estará exigido y su motor trabajará forzado. Otra opción que puede ser útil para usar el aire es utilizarlo en la función de deshumidificación.
Otro consejo es tratar de hacer todas las tareas en la habitación que se refrescó, para no tener que refrigerar la casa completa y todos los ambientes (lo que además de ineficiente será mucho más caro en la factura de luz). Una vez que el ambiente donde se va a permanecer entra en régimen, es bueno hacer todas las tareas en ese espacio.
¿Cómo cuidarse?
Ante la ola de calor y las alertas por temperaturas extremas, el Servicio Meteorológico Nacional y el Ministerio de Salud recomiendan aumentar el consumo de agua aunque no se sienta sed; evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas y las comidas muy abundantes; ingerir verduras y frutas; usar ropa ligera, holgada y de colores claros; permanecer en espacios ventilados o acondicionados y no exponerse al sol en exceso; reducir la actividad física; y, ante cualquier síntoma inusual relacionado a un golpe de calor, solicitar asistencia médica de inmediato.