La técnica universal para higienizar la dentadura dice que: el cepillo se debe tomar con firmeza para facilitar los movimientos de la muñeca; los dientes de arriba se cepillarán por cada una de sus caras desde la encía (abarcando ésta) hacia abajo, efectuando el movimiento diez veces cada dos dientes; los dientes de abajo se cepillarán hacia arriba por cada una de sus caras, efectuando el movimiento diez veces cada dos dientes; los dientes anteriores (incisivos y caninos) en su parte interna (porción del paladar y porción que da a la lengua) se "barrerán" con el cepillo en posición vertical. En sus caras externas se cepillarán.

Las caras masticatorias de los molares y premolares se cepillarán con un movimiento repetido de atrás hacia delante, o en forma circular.

Enjuagar bien la boca, de lo contrario los residuos que se han separado de los dientes volverán a depositarse sobre éstos.

Sostener firmemente el cepillo, colocar las cerdas sobre las encías a un ángulo de 45 grados, girarlo en un movimiento rotatorio para cepillar la encía y las paredes laterales de los dientes hasta en borde. Alejar el cepillo y volver a colocarlo contra la encía; presionar suavemente y repetir el cepillado.

Continuar el cepillado en grupos de dos dientes hasta limpiar perfectamente todas las superficies de los dientes que dan hacia fuera y pasar a cepillar las caras que dan al paladar, con los mismos movimientos rotatorios.

Cuando se cepilla los dientes del frente usar el cepillo en posición vertical para que las cerdas puedan limpiar correctamente, de lo contrario la limpieza no será adecuada.

Después, cepillar los molares inferiores donde el movimiento de rotación se efectúa de abajo hacia arriba. Continuar con las caras linguales de los molares inferiores. No olvidar que para limpiar los dientes inferiores en sus caras linguales, se debe ubicar el cepillo en forma vertical.

Por último cepillar las caras oclusales (con las que se mastica), moviendo el cepillo de atrás hacia delante, firmemente.