Bruselas ha dado un enorme tirón de orejas a Google. Lo ha hecho porque considera que las normas que impone a los fabricantes que utilizan Android en sus terminales son constitutivas de abuso de poder. El castigo que ha dedicido imponer la UE a la firma responsable del sistema operativo ha sido, nada más y menos, que la mayor multa que ha impuesto en su historia. Una cifra, nada baladí, de 4.340 millones de euros.
La decisión llega tras varios años de investigación y, aunque estaba previsto que se resolviese antes de iniciar el ‘parón’ del mes de agosto, su anuncio se pospuso, entre otras cosas, por las tensiones con la Administración Trump. Se decidió postergar a después de la cumbre de la OTAN para no crear (aún) más tiranteces de las existentes.
Fine of €4,34 bn to @Google for 3 types of illegal restrictions on the use of Android. In this way it has cemented the dominance of its search engine. Denying rivals a chance to innovate and compete on the merits. It’s illegal under EU antitrust rules. @Google now has to stop it
— Margrethe Vestager (@vestager) 18 de julio de 2018
La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, ha sido la encargada de anunciar la sanción hoy a las 13.00 horas. "Multa de €4.340 millones a Google por tres tipos de restricciones ilegales en el use de Android. Así ha cimentado su poder dominante como buscador. Negando a sus rivales una oportunidad para innovar y competir en sus méritos. Esto es ilegal bajo la legislación europea. Ahora Google tiene que parar".
La reacción de Google no se ha hecho esperar: "Android ha creado más opciones para todo el mundo, no menos. Un ecosistema pujante, rápidas innovaciones y precios más bajos son distintivos clásicos de una fuerte competencia. Recurriremos la sentencia de la Comisión", ha dicho un portavoz en un comunicado a medios. Poco después Sundar Pichai, CEO de la compañía, ha publicado un post en el que señala que "la decisión [de la Comisión] ignora el hecho que los móviles Android compiten con los teléfonos con iOS", confirmando también la decisión de recurrir la multa.