Desde el Banco Central se está apostando a ofrecer más alternativas para las operaciones digitales. En ese marco, el presidente de la entidad Federico Sturzenegger, junto al vicepresidente, Lucas Llach, anunció que desde el 15 de diciembre se podrá hacer pagos por medio del smartphone. Será a través de un lector que entregarán los bancos y añadirá al dispositivo. Servirá para las compras realizadas con tarjeta de débito.
También se contempla la creación de aplicaciones para usar el teléfono como una verdadera billetera electrónica. Son alternativas que ya se encuentran implementadas, de distintas formas, en varias partes del mundo y que, de acuerdo con las iniciativas anunciadas, deberían terminar de desembarcar en el país el año próximo.
¿Pero son métodos seguros? "Es fundamental que los usuarios conozcan si sus datos quedan guardados en el aplicativo, en el banco o en el comercio y si esa información se comparte con el comercio al momento del pago. A su vez, es de suma utilidad para ellos conocer cuales son los mecanismos de seguridad que están involucrados alrededor de sus transacciones y qué medidas se toman para mitigar el fraude", destacó Marcelo González, CEO VeriTran.
Y en este sentido destacó el rol de los datos biométricos a la hora de generar un entorno seguro. " Si el teléfono permite el pago de seguridad a través de huellas digitales entonces puedes apostar que cumple con las normas básicas de seguridad, porque eso es requisito para el pago móvil", aseguró.
La seguridad multifactor es la respuesta a este nuevo paradigma y resulta clave para la industria financiera, ya que permite proteger la información en el dispositivo, cuando viaja en el aplicativo y en las redes así como también dentro del banco.
En síntesis, primero se realiza la captura física de la huella, después el autenticador y luego el almacenamiento en una parte segura. Finalmente a Android sólo le llega un token que luego va a la nube. Son estas instancias la que hacen que el sistema sea más fiable.