Egipto y Dubai parecen ser polos opuestos en muchas aéreas como la económica y social. Pero a la vez, comparten cosas en común como son sus atractivos para los visitantes de todo el mundo. El primero por su rica historia milenaria y el segundo por tener un alto nivel de calidad de vida y ser un sitio con una arquitectura futurista. Ambos destinos turísticos aparecen como imanes para aquellos viajeros que ya conocieron lugares tradicionales de visitas en el mundo como Europa, Estados Unidos y El Caribe, por ejemplo. Hace algunos días, un grupo de sanjuaninos encabezados por el empresario Saúl Saidel recorrió puntos turísticos de ambos países para conocer todas las posibilidades que brindan para el viajero sanjuanino.
En ese recorrido, Saidel cuenta que la salida grupal consistió en visitar diversos lugares de atractivos turísticos, entre ellos las pirámides de Keops, Quefren y Micerinos. Además, los clásicos paseos en camellos y visita al museo de El Cairo, donde están los tesoros de Tutankamon.
El recorrido continuó en un crucero por el río Nilo. El grupo de viajeros visitó Luxor con sus templos milenarios que están en muy buen estado de conservación.
Luego el crucero puso proa Aswan. "Allí visitamos la obra de ingeniería más grande del mundo, la famosa represa de Aswan, después el grupo visitó el templo de Abu Symbel, que edificó Ramses II para su esposa Nefertitis", cuenta Saidel.
Ya de regreso a El Cairo, el grupo de sanjuaninos visitó la mezquita y la iglesia católica de La Sagrada Familia.
Paseo por el futuro
Del viaje por el pasado milenario de Egipto, la siguiente escala fue la sorprendente Dubai, una nación muy joven con arquitectura futurista y nivel de vida bastante alto si se lo compara con muchas naciones del mundo.
Saidel comenta que "fue una gran sorpresa para los visitantes conocer el aeropuerto muy moderno y de alta tecnología. En el trayecto al hotel, no podíamos dejar de sorprendernos con cada edificio, avenidas, su impecable Metro de 72 kilómetros de recorrido, entre otras maravillas".
Una de las visitas sorprendente fue al Burj Califa, el edificio más alto del mundo, de 136 pisos y 824 metros de altura, "llegamos hasta el piso 124 y fuimos sorprendidos por una espectacular vista panorámica de todo Dubai", cuenta Saidel.
Agrega que "entre tantas maravillas que se pueden vivir en ese lugar, disfrutamos de una cena en el único Hotel 7 estrellas del Mundo el Burj Ar Arab, donde no faltaron langosta, mariscos de todo tipo, cordero, carnes varias, y postres árabes.
El sanjuanino cuenta como anécdota que los remises de ese hotel son sólo Rolls Royce color blanco. La noche en la habitación más barata sale 7.000 dólares, mientras otras salen 30.000 dólares.
Otra aventura que el grupo llevó a cabo fue el Safari por el desierto que realizó en camionetas 4×4. El final de la travesía fue en un oasis, donde hubo cena y bailes típicos.
Dentro de este recorrido que en el futuro podrán hacer los sanjuaninos, el grupo de turistas visitó la capital de los Emiratos Arabes, que es Abu Dabi a 100 kilómetros de Dubai. "Una de las características de este lugar es que se producen 2.850.000 barriles por día, lo cual nos hizo entender por qué es un país libre de impuestos, ni los ciudadanos ni las empresas pagan impuestos" comenta Saidel.
Otro de los lugares imperdibles para visitar es el denominado Mercado del Oro. Se trata de 6 cuadras de negocios con sus vitrinas abarrotadas de joyas. Lo más sorprendente, sin custodia policial, ni de otra índole. "Dubai es un país seguro para la llegada de turistas, es decir que se puede salir a cualquier hora y sin ningún sobresalto", concluye Saidel.

