Conforme a lo anticipado en el artículo anterior, las localidades de Vallecito y La Planta – Marayes, son parajes sanjuaninos afectados por un clima hiper desértico a los que la falta de agua apta para el consumo sumerje a la escasa población existente a condiciones infahumanas de vida y otorga escasas posibilidades de desarrollo socioeconómico.
Por este motivo es que consultamos al ingeniero Gerardo Salvioli, profesor titular de la cátedra "Estudios Hidrológicos", Facultad de Ingeniería, UNSJ, quien esta segunda y última nota propone las siguientes acciones:
Difunta Correa – Vallecito
* El paso previo a efectuar es un censo de requerimientos actuales y futuros de agua para distintos usos, fundamentalmente para viviendas particulares, sanitarios, riego de forestales, hotel, entre otras demandas.
* Actualizar el estudio y proyecto realizado por profesionales de Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE, Proyecto Nº 13-01-83) denominado "Acueducto provisión agua potable y riego al paraje Difunta Correa, Dpto. Caucete".
Actualmente la traza del acueducto podría ubicarse entre la Ruta Nacional Nº 141 y la denominada "Senda del Peregrino". Esta última, hoy en construcción, es una ciclovía de unos 29 km de longitud y 2,5 m de ancho, que estará totalmente asfaltada, que se desarrolla paralela a las rutas nacionales Nº 20 y Nº 141, entre cercanías de la ex estación Pie de Palo del Ferrocarril Gral. Belgrano, a la salida del área cultivada de Caucete por Ruta Nacional Nº 20, y hasta La Difunta Correa – Vallecito.
El acueducto podría suministrar agua para el riego de los forestales que se implanten a la vera de la Senda del Peregrino y también grifos públicos para quienes transiten por la senda o la ruta vecina. Al ubicar la traza paralela a la senda precitada, se contaría con el relevamiento topográfico efectuado para ésta y, además, con las diversas obras de drenaje (principalmente alcantarillas) que permitirían a bajo costo colgar la cañería de la infraestructura de las obras. Cabe agregar que es urgente controlar que por la senda circulen exclusivamente caminantes y ciclistas, bajo ningún concepto automotores.
* Es conveniente estudiar las alternativas de:
a) captar agua subterránea (de unos 2000 micromho/cm y nivel estático a unos -15 m);
b) captar agua superficial del canal que cruza la ruta 20 aproximadamente un kilómetro al Oeste del inicio de la senda.
Marayes – La Planta
* Efectuar un relevamiento de demandas de agua para distintos usos, principalmente para consumo humano y abrevadero de ganado.
* Estudiar las siguientes alternativas:
a) En épocas de sequía crítica, diferenciar el uso del agua según las calidades de las fuentes, empleando exclusivamente los caudales provenientes de la Quebrada de Los Hornos para suministro de agua potable y destinando a abrevadero del ganado las aguas cuyas características químicas superan los límites tolerables para consumo humano.
b) Realizar el estudio y proyecto de una perforación ubicada a unos 12 km al Este de Marayes y de un acueducto que por bombeo impulse de ésta y hacia el poblado, el agua subterránea que de la misma se obtenga. En esta zona se cuenta con los antecedentes de tres pozos que alumbraron aguas, en principio, aptas para consumo humano; uno perforado por el CRAS a unos 12 km al Este de Marayes junto a la vieja ruta paralela a las vías ferroviarias (VF 8, Conductividad Eléctrica 1.620 micromho/cm) y los otros dos perforados uno al Sur de la ruta nacional 141 ex ruta 20 (propiedad Turcumán, 90 m de profundidad, C. E. 1.620 micromho/cm) y el otro al Norte de la citada ruta).
c) Estudiar la posibilidad de trasladar a los pobladores o al menos a una parte importante de ellos, desde su asentamiento actual (Marayes-La Planta) hasta la zona donde existen comprobadas posibilidades de extraer agua subterránea de calidad adecuada y en cantidad suficiente para satisfacer sus necesidades.
Para ello será necesario expropiar un predio que les permita desarrollar sus actividades socioeconómicas.
Esta alternativa, que en principio podría considerarse desatinada, ofrece la gran ventaja para los habitantes de los parajes en cuestión, de disponer en un futuro de terrenos de buenas condiciones para la agricultura y disponibilidades hídricas para el desarrollo de la misma; además, los lugareños de La Planta, se alejarían de las viejas y abandonadas instalaciones y de los relaves fuertemente mineralizados existentes en el sitio.