Que una escuela cumpla un año más de vida, es todo un acontecimiento. Y no solo se reduce a lo social, sino que inevitablemente repercute en los cientos de personas que pasaron por sus aulas para adquirir desde el conocimiento más básico hasta los pilares fundantes de lo que llegarán a ser en sus vidas profesionales. También trasciende a docentes, directivos y el resto del personal que hace el día a día de la vida del colegio.
Justamente esta es la sensación que por estos días se respira en la Escuela Modelo de San Juan, que durante todo el 2012 festejará sus 50 años de vida.
Vale decir que ésta no es una escuela más para la provincia. Fue el establecimiento que redireccionó el camino de la educación en San Juan ya que fue la primer escuela privada -aún antes de que se promulgara la ley provincial de Enseñanza Privada que data de 1965- no confesional, para darles una opción diferente a aquellas familias que no querían ligar necesariamente a la escuela con la formación religiosa. Por supuesto que en ese entonces existían otras escuelas particulares en la provincia, pero todas tenían un cariz católico y no había lugar para la enseñanza laica. Con su nacimiento, esta institución educativa fue puntal y por qué no modelo, para la creación de otras con características similares.
Un sueño hecho realidad
Con los avatares y amenazas de la Segunda Guerra Mundial, los Guida cargaron las cosas que tenían en Capri y como muchos inmigrantes, abandonaron su Italia natal. Cruzaron el océano hasta América para darles un futuro a sus hijos. El primer destino de esta familia fue Buenos Aires, después se radicaron en Cuyo. Gino, más conocido como "El teacher", un adolescente por ese entonces, vino a San Juan a terminar el secundario. Su hermana, en cambio, se casó con un mendocino, con quien comenzaron a hacer crecer una empresa de venta de aceitunas y aceite de oliva, a la que durante un tiempo el hermanito menor, le ofreció su mano de obra.
Pero las aspiraciones de Gino eran otras. No estaban en la producción olivícola. Tampoco en la ferretería que su padre tenía en San Juan. A la vocación, la descubrió cuando comenzó a estudiar inglés. El idioma le demostró que abría puertas a un mundo interior pero también que le permitía proyectarse a otros mundos. Fue entonces que se permitió soñar con tener una escuela. No fue fácil porque su proyecto era único, no existía hasta ese momento y venía a romper una regla de oro en una sociedad tradicional como la sanjuanina. Sin embargo, lo concretó, tras años y años de propuestas, años y años de trabajo, siendo profesor y ya casado con Hilda Cacault.
La Escuela Modelo de San Juan -que tomó prestada la parte simbólica de su nombre y los colores de su uniforme del porteñísimo Colegio Argentino Modelo, donde sus directivos y docentes fueron por años a capacitarse- nació con el inicio de clases, un 2 de marzo de 1962. En ese entonces no tenía un local propio sino que abría sus puertas en un predio alquilado en la calle Laprida al 350 (este).
Sus primeros alumnos fueron tan solo 49, los que estaban divididos entre el jardín, un primero, segundo, tercero, sexto y séptimo grado.
Para todos ellos la propuesta era bastante innovadora respecto de las ofertas educativas del momento. En esta escuela además de lengua y matemática, se podía aprender inglés, danzas folclóricas, un deporte (fútbol para los varones, aunque con los años se probó con rugby que no funcionó y handball y hockey sobre césped para las nenas) con una carga horaria igual a la de los saberes primordiales de cualquier escuela. También se enseñaba declamación y apenas unos años más adelante, se incorporó una novedosa materia con un nombre muy atractivo: educación para la vida, que no era ni más ni menos que la información y el debate que hoy debería tener lugar en cualquier charla de Educación Sexual, con conceptos no sólo biológicos sino puntualmente con enseñanzas basadas en el amor y los afectos para el desarrollo como persona, exigida por la ley de Educación Nacional.
"La escuela fue obra de un visionario que no sólo buscó alternativas educativas interesantes para cualquier persona que se está formando sino que inclusive estuvo en todos los detalles. Por ejemplo tenía como particularidad que ponía a disposición de los padres una movilidad escolar, que no era ni más ni menos que un colectivo pintado con los colores amarillo y verde que nos distinguen hasta ahora. Lo manejó por años Don José Macías y fue otra innovación que con los años fue creciendo y dando trabajo a muchas familias que se dedicaron al transporte escolar”, cuenta Susana Cabrera de Roda, eterna maestra de primer grado (lleva en la escuela 45 años, de los cuáles 22 estuvo frente a ese nivel) y actual directora del establecimiento primario.
En los primeros años, las clases las dictaba un puñado de maestras y entre ellas, como uno más, "El teacher”, enseñaba inglés y deporte. Así siguió inclusive en 1963, cuando el proyecto recién empezaba a caminar -por ejemplo, en ese período, egresaron sus cinco primeros alumnos- y Guida se quedó solo al fallecer su compañera de sueños y la auxiliar que lo acompañaba en la escuela.
"Cuentan que esa enorme pérdida no lo hizo declinar. La escuela siguió con sus principios educativos. Hasta que en 1964 ingresó una maestra mendocina pero que había estudiado en Buenos Aires, Betty Buberman, a trabajar en el 5¦ y 6¦ grado. Ella trajo consigo a la escuela su interés por la teoría del Constructivismo que le permiten al chico avanzar en base a sus propios conocimientos como así también aplicó ideas nuevas que había conocido en los cientos de congresos a los que asistió”, agrega la directora.
Así como "la señora Betty” -tal como la llamaban todos en el ámbito escolar- pudo sugerir la implementación del apoyo escolar "para los alumnos que estaban flojos en alguna materia”, la exigencia de la corrección diaria de todas las tareas del cuaderno por parte de las maestras como demostración de interés y respeto hacia el estudiante, o que los deberes llegaran a casa mimeografiados para no perder tiempo en copiar del pizarrón y hasta el cambio de la vieja y querida tiza por pizarras de fórmica y marcadores para evitar el polvillo, sólo por citar algunos ejemplos, también supo ganarse el corazón de Guida. Juntos empezaron a trazar la realidad de su familia y también de la escuela que llevaban adelante todos los días.
Terreno para la innovación
Poco a poco, la "Modelo” empezó a ser reconocida en el medio por su calidad educativa y lógicamente con ello incrementó su matrícula. Recién a los 10 años de haber sido creada tuvo su propio local, el mismo que en la actualidad, sobre la Avenida Libertador y Alvear. Ese mismo año se implementaron los dos turnos para la asistencia de alumnos, que, eran tantos que demostraron que la escuela volvió a quedar chica. Entonces en 1983, se separó al jardín de infantes, ubicándolo en un edificio propio.
Hoy por hoy, la escuela tiene tres edificios, uno para cada uno de los niveles educativos, ya que desde 1996, incorporó a su oferta educativa -en un principio como prueba piloto- al entonces EGB 3, hoy secundario. Además tiene un polideportivo que se inauguró en el 2006.
Pero mucho antes de estas ampliaciones, más precisamente a comienzos de la década del "80 y con la llegada de las primeras computadoras, la escuela se hizo eco de la necesidad de darles estas herramientas a sus alumnos. Con varias máquinas -obsoletas si se las calificase hoy, pero en ese entonces, dotadas de la última tecnología- desde los pequeñitos de 1¦ grado hasta los de 7¦ incorporaron la computación como una materia más.
"Recuerdo que las maestras empezamos en el "83 a dictar el sistema Logo con su tortugita, que era algo básico pero realmente fue de mucho impacto ya que no había otra escuela que lo enseñara a sus alumnos. También aprendimos a imprimir”, relata con orgullo Susana, quien reconoce que a partir de ese momento, las clases de computación se fueron perfeccionando -al igual que las de Música, Plástica y las de Tecnología que reemplazaron a las de Actividades Prácticas- ya que incorporaron a expertos en la materia. Pero esto no fue todo. El interés por el aprendizaje fue apoyado por la institución con la adquisición y renovación de sus equipos a medida que fueron apareciendo novedades tecnológicas. De hecho, en el 2008, fue pionera en la provincia y prácticamente en el país, al adquirir un laboratorio de ciencias inteligente (dotado de un sistema computarizado que incluye sensores que enseñan cómo medir la temperatura, la velocidad y otras características de los objetos por ejemplo) más tres pizarras digitales interactivas (que no es otra cosa que una pantalla gigante conectada a una CPU o notebook y un cañón o proyector y hasta una cámara filmadora que permite dar teleconferencias, escribir como si fuese un pizarrón (trae marcadores de tinta digital), navegar por Internet, ver desde un mapa, una película o hacer partituras de música, entre otras cosas). Estas pizarras son soportes para todas las clases, de todas las materias, en todos los niveles educativos.
No conformes con este adelanto, en el inicio de clases del 2012, le adosaron un aula móvil con 30 notebook que recorre todos los grados que necesiten para sus clases de estas herramientas. Así por ejemplo, los alumnos de 5¦ y 6¦ grado hacen algunas tareas escolar vía Internet.
"Pero ojo que en la escuela no todo es tecnología. Hay un interés especial en tratar al alumno como persona única, en conocer lo que le pasa, qué contenidos le cuesta adquirir o cuales de cuáles aprendizajes disfruta”, deja traslucir su alma docente.
Paralelamente al aprovechamiento de la computación, la escuela dio otro paso ejemplificador en lo que a la lengua respecta y fue la apertura de una biblioteca en cada grado con libros acordes a cada edad. Y, como si todo esto fuera poco, la implementación de libros de lectura y ciencias -por ahora de 1¦ a 4¦ grado- escrito por las mismas maestras y con el aporte de los chicos.
"Una escuela debe dar lugar a la capacidad creadora e innovadora de los chicos. Eso es lo que nos proponemos a diario, desde hace 50 años y por muchos años más”, dice feliz, Susana de Roda, en nombre de todos los que hacen el día a día de la Escuela Modelo de San Juan.

