Siempre que se habla de golpe de calor es asociado a pequeños y ancianos, sin embargo puede presentarse en deportistas desprevenidos o personas que hacen actividad física sin asesoramiento adecuado.
"Es fundamental una buena hidratación, y si se trata de un deportista o si la actividad es intensa, deben agregarse sales y potasio. Este es un requisito fundamental para estar bien a la hora de la práctica deportiva. De otro modo se produce deshidratación, esto trae aparejado calambres, mareos, pérdida de conocimiento, la persona empieza a sentirse obnubilado y hasta perder la conciencia", explica Martín Sassul, médico deportólogo.
El chequeo previo debería ser una constante para todos los que quieran practicar un deporte. "Un estudio cardiológico previo es fundamental. Además para quienes inician una actividad lo primero que deben tener en cuenta es comenzar con una caminata y avanzar con el tiempo en otras actividades de mayor consumo aeróbico", dice.
Lo cierto es que no siempre se cumple con estas reglas y, si a esto se suma el calor, las cosas se complican.
No es casual que el golpe de calor se haya convertido en uno de los enemigos más frecuentes de quienes practican actividades al aire libre en épocas de verano.
Cuando una persona que practica alguna actividad física o deportiva
realiza sus ejercicios con elevada temperatura ambiental suele aparecer este problema. Los síntomas que se presentan son varios:
* La piel suele estar seca, enrojecida y caliente.
* Generalmente sufre cefaleas, taquicardia, convulsiones y actúa de manera extraña. Se puede llegar a tener pérdida de conciencia y en el peor de los casos llegar al coma.
* Puede tener shock de tipo frío o caliente, comenzar con sudor o taquicardia.
* Pueden haber diferentes reacciones de acuerdo con cada persona.
* Si se producen estos síntomas hay que obligar al deportista a interrumpir su actividad. Posteriormente llevarle a un sitio fresco y sombreado. Para favorecer el descenso de la temperatura hay que retirarle la ropa. Después aplicar bolsas de hielo en el cuello, las axilas y las ingles.
* También se lo puede envolver en toallas húmedas en agua fría para bajar la temperatura.
* Si el deportista está inconsciente hay que colocarlo en posición de recuperación horizontal. No es aconsejable la rehidratación oral hasta que la temperatura descienda a 38º ó menos.
* Si es necesario solicitar atención médica de urgencia.