La Ruta 150 en la provincia de San Juan, se ha convertido en un eslabón fundamental para el desarrollo industrial, comercial y turístico de Argentina, Chile y todo el continente sudamericano. Esta obra que recorre 389 kilómetros, es la parte final del monumental Corredor Bioceánico, el cual nace con la intención de crear una ruta continental que una el Océano Atlántico con el Pacífico. La Ruta 150 es una de las obras viales más caras que se construyen actualmente en el país. En total se invertirá en ella unos 800 millones de pesos provenientes de Vialidad Nacional. Su finalidad específica será unir la Ruta Nacional 38 en la localidad de Paquía, con el paso de Agua Negra, a más de 4.779 metros sobre el nivel del mar, en el límite con Chile. Luego de atravesar los Andes, el camino continúa en el vecino país trasandino y conduce a la ciudad costera de La Serena. La gran importancia del eslabón de hermandad que viene a concluir la Ruta 150 es la necesidad que posee actualmente el Cono Sur de colocar su producción exportable en el merado mundial, principalmente los mercados de Asia y Pacífico. Esto provocaría un incremento en el comercio exportable en las áreas de influencia del Corredor. La IV Región chilena (Coquimbo) dinamizaría su puerto gracias a la carga de los productores argentinos. Mientras que también se reactivaría el turismo y la economía de la zona Norte de San Juan (Jáchal, Ischigualasto e Iglesia).