Una favorita tradición navideña llega a la ciudad de San Juan para el primer estreno de ballet en el Teatro del Bicentenario el próximo 1, 2 y 3 de junio. Se trata de “El Cascanueces” a cargo de adaptación coreográfica y directora general Lidia Segni. La hermosa melodía de Tchaikovsky, será interpretada por la Orquesta Sinfónica de la UNSJ, a cargo del maestro Emmanuel Siffert. La puesta en escena es en co-producción con el Teatro Colón.
Además, la obra incluye la participación de los dos primeros bailarines del Teatro Colón y un elenco de baile integrado por sanjuaninos que le pondrán el sello artístico propio trayendo alegría para niños y adultos por igual.
Y, tú estás invitado por Ministerio de Turismo y Cultura junto a Eduardo Savastano, director del Teatro del Bicentenario, a vivir esta experiencia inolvidable que ha sido disfrutada por varias generaciones en el mundo. El clásico cuento de Hoffmann bajo la música de Tchaikovsky reunirá a un destacado elenco de bailarines y nos invitan a ser parte de un maravilloso viaje a través de la nieve y conocer el gran Reino de los Dulces.
Han pasado los años, las generaciones vienen y van, pero el encanto de esta historia se mantiene, una explosión de magia para calentar nuestros corazones durante la temporada de invierno en nuestra provincia, “El cascanueces’ basado en el libro de cuentos de Ernst Theodor Amadeus Hoffmann, titulado “El Cascanueces y el Rey de los ratones’ (1816). Sin embargo, el argumento que daría vida años más tarde con su adaptación es Alejandro Dumas (padre) al ballet más representado y conocido de Tchaikovsky, quien puso la música a esta obra. Se estrenó en 1892, en el teatro Mariinsky de San Petersburgo bajo la coreografía de Lev Ivanov, el libro de Marius Petisa y la música de Piotr I. Tchaikovsky.
Un cuento digno de atesorar
Esta historia está basada en el libro de cuentos de hadas, titulado “El Cascanueces y el Rey de los ratones”, no solo sirve para apreciar la obra clásica sino también para guardar en el corazón de niño que cada uno lleva. Un cuento digno de leer para comprender lo que sucederá en escena.
“El granjero Stahlbaum y su señora celebraban una fiesta de Navidad. Clara y su hermano, hijos de Stahlbaum, estaban muy contentos. Clara esperaba impaciente al mago Drosselmeyer, su tío favorito, un fabricante de juguetes que siempre llegaba con alguna novedad.
El mago llegó con su sobrino, Fritz, y una gran caja de sorpresas de la que fueron saliendo sucesivamente un soldado bailarín, una muñeca y un oso polar con su cría. Clara quería quedarse con la muñeca, pero su madre le explicó que es imposible.
La niña comenzó a llorar desconsoladamente y Drosselmeyer sintiendo la pena de la niña, la sorprendió con un regalo especial: un gran cascanueces de madera. Su hermano recibió el Rey de los Ratones. En una pelea entre hermanos, se rompe el Cascanueces, pero Drosselmeyer, lo arregla con una venda y lo deja casi perfecto.
Cuando la fiesta termina, los invitados se van y el pequeño Cascanueces se queda junto al árbol de Navidad. Antes de la medianoche, la niña baja para ver a su Cascanueces, pero al quedarse dormida comienza a soñar que todo cobra vida a su alrededor.
Aparece el Rey de los Ratones y su banda de roedores que aterrorizan a la niña. Pero de pronto llegan los soldaditos de juguete comandados por el cascanueces para defender a Clara. Fritz los ayuda como capitán de artillería y la niña se siente protegida por estos nuevos amigos. Sin embargo comienzan a perder la batalla. Clara se arma de coraje y lanza una de sus zapatillas al Rey de los Ratones. Lo derriba, el Cascanueces lo mata y los ratones huyen.
Es entonces cuando el Cascanueces se transforma en un hermoso príncipe e invita a Clara y a Fritz a un viaje a través del bosque encantado. Al llegar al bosque, se encuentran con el rey y la reina de las nieves quienes bailan para ellos junto a los copos de nieve. La danza se va convirtiendo en un torbellino y finalmente impulsa al trineo, con el príncipe, Clara y Fritz a bordo, hacia un lugar lleno de magia.
Clara, Fritz y el príncipe llegan al reino de los confites, donde los recibe un hada. Allí el hada pide al príncipe que narre sus aventuras como Cascanueces y tras esto, comienza una fiesta maravillosa que culmina en un baile entre el príncipe y el hada. Clara y Fritz vuelven de regreso a la realidad en su trineo”.
Argumento de la obra
Este clásico de la danza entrelaza la historia de Clarita, Cascanueces y los ratones liderados por su rey, recreando un perfecto cuento de hadas que transporta al público a un mundo de fantasías y de sueños cumplidos. La bella música de melodías inolvidables y riquezas rítmicas de Tchaikovsky, interpretadas por la Orquesta Sinfónica de la UNSJ a cargo de Emmanuel Siffert y la exquisita escenografía del Teatro Colón se unen al colorido vestuario diseñado por Gino Bogani. El primero de junio en San Juan se presentará con la adaptación coreográfica de Lidia Segni en dos actos y cinco escenas.
Fotos: Federico Levato