Las importaciones de soja de China, principal comprador de la oleaginosa, cayeron a su nivel más bajo en cinco años durante los dos primeros meses del año, lastradas por los escasos márgenes de trituración y la menor llegada de buques durante las vacaciones del Año Nuevo Lunar, informa la agencia Reuters.
Las importaciones de enero y febrero juntos fueron de 13,04 millones de toneladas métricas, un 8,8% menos que en el mismo periodo del año anterior, según la Administración General de Aduanas.
Las importaciones de los dos primeros meses del año se ajustaron a las expectativas de los analistas, que las situaban entre 13 y 14 millones de toneladas.
“Los retrasos en los envíos por los escasos márgenes de trituración, las vacaciones del Año Nuevo chino y la lentitud de los trámites aduaneros son las razones de la cifra relativamente baja de importaciones”, declaró Rosa Wang, analista de la consultora JCI.
China combina los datos de importación de enero y febrero en una sola publicación para suavizar el impacto de las vacaciones del Año Nuevo Lunar, que caen en cualquiera de los dos meses cada año.
La demanda china de soja para piensos podría verse afectada este año por las nuevas normas de control de la capacidad de producción porcina del país, después de que la agresiva expansión de las granjas provocó un exceso de oferta de cerdos y un aumento de las pérdidas.
China rebajó el objetivo nacional de retención normal de cerdas reproductoras de 41 millones a 39 millones, en una medida que, según los analistas, podría reducir el tamaño de la mayor cabaña porcina del mundo en al menos 22 millones.
En tanto, la cosecha de soja en los principales países productores, Brasil y Argentina, avanzaba a buen ritmo, con expectativas de abundante oferta.