El viernes por la noche acompañada por su padre, María Florencia Taddei Farfán ingresó al Salón Le Parc, para festejar sus quince años, junto a más de quinientos invitados.

María Florencia es hija de Adriana Farfán de Taddei, Doctora y Licenciada en Fonoaudiología y Gustavo Taddei Montoya, Abogado y Juez de Trabajo, tiene una hermana María Paula Taddei Farfán.

Florencia cursó sus estudios desde Jardín de Infantes hasta el año próximo pasado en colegio Saint Paul´s, siempre con los mejores promedios es abanderada. En la actualidad es alumna de la Católica dónde culminará la etapa secundaria para estudiar Abogacia y luego seguir la carrera Diplomática para ello estudia Inglés y Francés.

María Florencia ha practicado Equitación con un caballo de su propiedad y práctica tenis en el Law Tennis Club.

El profesor Federico Heredia es el encargado de las clases de tango de la quinceañera, otra de las actividades de Flopy. Junto a su hermana, en un pasaje de la fiesta acompañadas por los profesores, con vestidos obsequiados y confeccionados por Francisco Zito, deleitaron mostrando su pasión por el Tango.

Sus padres nos cuentan que es una personita muy dulce, alegre, amiguera, compañera de su hermana mayor de la cual solo las separa un año y ama los perros, prueba de ello es el amor que siente por sus dos Manto Negro.

En Nuestra Señora de la Merced a cargo del Presbítero Román Becerra y del Padre Francisco Armendaris, junto a más de cincuenta personas, días pasados se llevó a cabo la Misa de Acción de Gracia.

El vestido de satén de seda natural y tul bordado en cristal en degradé fucsia-magenta de María Florencia, fue confeccionado por el diseñador sanjuanino Francisco Zito, al igual que los vestidos que lucieron la mamá y hermana. La peinó Miguel Angel Alessi y el maquillaje estuvo a cargo de Angela “staff” de Alessi. María Florencia lució bellísima y cada momento Francisco Zito y Miguel Angel Alessi se encargaron de arreglarla para las fotos.

El Caterring estuvo a cargo de Carlos y Laura de Godoy para De Partty Catering. De la iluminación se encargó Sergio González y el sonido se lo confiaron a Portillo.