A un paso del mes de diciembre, ya hay muchos que empezaron a pensar y a sacar cuentas. Es que quien más, quien menos, tiene a quién agradecerle por algún gesto o favor realizado en el año o sencillamente compartir un brindis para celebrar lo vivido. Este tipo de regalos comúnmente llamados empresariales -aunque no en todos los casos hay una relación comercial en el medio- se entiende como un cariño, una atención o una demostración de cortesía que, en el caso de las grandes empresas se multiplica para los empleados y proveedores, se ha convertido en una tendencia en San Juan. Según los registros de María Silvia Varese, quien está al frente del café y la regalería dónde se comercializan todos los productos bajo la marca Héctor Montilla (además de otros proveedores), "son las grandes empresas las que más regalos hacen. Y lo bueno es que la mayoría elige los productos locales, especialmente vinos y espumantes pero también dulces, conservas, aceites de oliva, aceto balsámico, entre otras delicatessen para estos agasajos, pensando que lo comestible a todos les gusta y por otro lado, priorizando la buena calidad de los productos y la variedad que ofrece el mercado”.
Lo mejor de todo es que cada regalo se puede armar a medida y según el gusto del agasajado, incluyendo por supuesto, aquellos sabores preferidos.Los valores dependen de la cantidad de elementos que se incluya pero hay que pensar desde los 100 pesos en adelante, según detalla la comerciante.
A nivel nacional -ya que a nivel local no están registrados- se calcula que en los regalos empresariales, se invierten más de 2.800 millones de pesos al año.