La alergia estacional es un problema global de salud pública. Su elevada prevalencia, la existencia de enfermedades comórbidas, la afectación de la calidad de vida del paciente y los elevados gastos que ocasiona hacen que deba ser considerada como una enfermedad de alto impacto sanitario. No obstante, a menudo es una enfermedad soslayada y, por consiguiente, subdiagnosticada y subtratada.
Por eso es importante saber lo máximo posible sobre esta afección, especialmente cuando las víctimas son los más chicos de la casa.
-¿Cuándo se presenta la alergia estacional en los niños por primera vez?
Las alergias estacionales se pueden iniciar prácticamente en cualquier momento de la vida de una persona, aunque suelen alcanzar su máxima expresión a principios de la segunda década, no obstante, hasta un niño que no ha presentado nunca una alergia estacional, la puede desarrollar.
-¿Cuáles son las diferencias entre alergia estacional y catarro común o bronquitis?
Si un niño desarrolla un "catarro" cada año en la misma época, es bastante probable que se trate de una alergia estacional y no de un catarro común.
Los síntomas de la alergia, que suelen aparecer de repente y durar mientras la persona se sigue exponiendo a su alergeno en particular, abarcan: estornudos, prurito de nariz y/o de garganta, congestión nasal, secreción nasal acuosa, tos. Estos síntomas pueden además estar acompañados de prurito y enrojecimiento ocular, lo que recibe el nombre de conjuntivitis alérgica.
Si el niño también presenta dificultad respiratoria y se lo observa agitado, es posible que su alergia haya comprometido además sus bronquios y se deberá evaluar la posibilidad de que padezca asma.
Por otro lado los niños que presentan afecciones de vías aéreas respiratorias durante todo el año o recurrentes, con necesidad de múltiples antibióticos o internaciones, deberán someterse a un estudio para evaluar el correcto funcionamiento de su sistema inmune o de defensas.
-¿Porqué se produce la alergia estacional?
En la alergia a diferentes sustancias, incluyendo pólenes, lo más frecuente en esta época del año. Se produce porque el sistema inmune de personas alérgicas, que son todas aquellas predispuestas genéticamente, reaccionan frente a dichas sustancias como si fueran invasoras o dañinas. Frente a esto el sistema inmune libera sustancias químicas, como la histamina, en el torrente sanguíneo para defenderse contra ellas. Es la liberación de estas sustancias químicas la que ocasiona los síntomas alérgicos.
El recuento de polen mide la cantidad de polen que contiene el aire. Las concentraciones de polen suelen ser superiores por la mañana y en los días cálidos, secos y ventosos e inferiores en los días fríos y húmedos. Siendo San Juan, una provincia de clima cálido y seco, esta condición se ve exacerbada, contribuyendo a ser una de las provincias que más sufre de estos padecimientos.
El tipo específico de polen al que sea alérgica una persona determinará cuándo aparecerán sus síntomas, por eso la necesidad en estos casos de testificar, es decir, realizar diversas pruebas para descubrir qué sustancia es la que afecta a cada persona.
-¿Hay niños más predispuestos que otros?
En lo referente a predisposición, la herencia juega un rol determinante, hasta el punto de que se puede afirmar con certeza, que cuando uno de los padres es alérgico, el niño tendrá 40 por ciento de probabilidades de serlo, mientras que dicha condición se eleva a un 70 por ciento cuando ambos padres lo son.
-Signos de sospecha en niños muy pequeños de hasta 2 años
Con respecto a los niños menores de 2 años, es poco probable que desarrollen alergia estacional, aunque una pauta de alarma, que indica posibilidad de que en un futuro la desarrollen, puede ser la alergia alimentaria (leche, fundamentalmente huevo) o dermatitis atópica.
No obstante sí es frecuente en esta edad la posibilidad de que desarrollen hiperreactividad bronquial, a veces secundario a infecciones virales, que fácilmente puede confundir el cuadro.
-¿Este tipo de alergia tiende a desaparecer sola?
Si bien algunos estudios revelan que los síntomas alérgicos suelen desaparecer en etapas tardías de la vida adulta, lo más adecuado es la consulta oportuna de cada paciente que permita evaluar frente a qué sustancia se encuentra sensibilizado, ya que esto es pasible de tratamiento específico y mejora en forma sistemática la calidad de vida de cada paciente.
-Tratamiento y formas de abordaje
El tratamiento se basa en una triada caracterizada por: control ambiental y por esto la importancia de testificar porque podremos identificar la sustancia interviniente en el cuadro, medicación antiinflamatoria, que será utilizada cada vez en menores concentraciones y la inmunoterapia alergeno específica, definida por la OMS, como el único tratamiento capaz de cambiar la historia natural de la enfermedad alérgica.
-¿Qué estudios hacen falta para diagnosticar la alergia estacional?
Estudios de rutina, Rx de senos y/o pulmón, espirometría y testificación son adecuados para un correcto abordaje. En pediatría suele ampliarse con estudios inmunológicos que valoran funcionamiento del sistema.
-¿El tratamiento habrá que realizarlo todo el año o meses previos a las estaciones problemáticas?
En caso de resultar positiva la testificación para un determinado polen el tratamiento con inmunoterapia deberá administrarse durante todo el año. Si el resultado de la testificación arroja valor negativo podrá utilizarse sólo medicación preventiva en época crítica, reevaluando al año siguiente si se produjo sensibilización polínica.
-Una alergia estacional sin tratamiento puede derivar en asma?
Si el paciente presenta sólo rinitis alérgica pero con testificación muy positiva para distintos alergenos, la conducta correcta sería realizar inmunoterapia desensibilizante para cambiar la evolución natural de la enfermedad alérgica que sí puede desencadenar asma.
-¿Cuánto dura la sintomatología?
Por lo general la sintomatología persiste mientras el polen y/o sustancia que desencadena el cuadro persista en el ambiente.
-¿Se debe mandar a un niño que padece alergia estacional a la escuela si está con síntomas?
Un niño que se encuentra sintomático, tiene marcado compromiso de su estado general, incluso probablemente no logró descansar adecuadamente la noche anterior, por lo que resulta recomendable que no asista al colegio en esas condiciones