El pincho en pleno uso. Se pueden asar más de ocho kilos de carne en cada uno.

 

Tanto le gusta preparar asado y entretenerse en su pequeño taller metalúrgico que el resultado no podía ser otro: Un pincho para asar carne a las llamas cuyas características son tan especiales que pudo patentar el modelo y la marca. El autor de Pincho Easy Barbecue (parrilla fácil) es Jorge Cabral, un profe de educación física, y amante del kayak, que ahora apuesta fuerte a difundir su obra en la provincia y en todo el país.

Todo comenzó por una cuestión de necesidad, pero sobre todo porque le encanta agasajar a su familia y amigos con un buen asado. Así es que decidió fabricar un pincho tradicional para llevar a donde lo necesitara, pero ahí vio que transportarlo era un inconveniente por su forma y tamaño. Ese fue el momento exacto en que la pasión se transformó en ingenio y en poco tiempo tenía el diseño: un pincho desmontable que se arma en un par de minutos ajustando doce piezas con ocho tornillos. Así de fácil queda listo para ser utilizado. Además se puede regular altura y posición, y para trasladarlo se usa un práctico estuche con manija.

Otra de las novedades es que cuenta con una llave con dos extremos, uno es un tenedor para servir la carne y el otro es una herramienta para ajustar las piezas, o bien aflojarlas.

No falta el manual con recomendaciones de uso y todo lo necesario para aprender el armado, aunque éste es muy sencillo.

“La idea del estuche surgió porque es la única forma de no llenar de grasa ni de olor el baúl del auto. De esa manera queda herméticamente cerrado porque lo primero que observé es que tanto clubes como campings tienen parrillero pero con equipos tradicionales y no para asado a las llamas, así es que necesariamente hay que llevarlo. Además está pensado para que tanto el armado como su uso sea realmente fácil+, cuenta Jorge.

La base consta de tres patas de hierro torsionado por lo se adapta a cualquier tipo de suelo, incluso parrilleros tradicionales.

Jorge no está sólo en su taller metalúrgico ubicado en el fondo de la casa de su hermana. Lo acompaña Andrés Ibaceta, su amigo y fiel aliado en las ideas y en el trabajo. El es informático pero también tiene como hobby la metalúrgica.

A la fecha han construido más de 50 pinchos, siempre asegurando una calidad garantizada que les permita en algún momento llegar a distintos puntos de la provincia y el país.

La idea y el aliento para patentar este producto surgió de un grupo de colegas de Jorge, quien es profe de educación física y preceptor. En ese ámbito es donde un día mostró el flamante modelo y lo alentaron para darle un nombre.

 

Jorge Cabral muestra el estuche contenedor del Easy Barbecue, además se ve como el pincho se adapta también al parrillero.

 

“Hace menos de un año que lo diseñé. A mi familia le gustó mucho, igual a mis amigos y compañeros de trabajo que me dijeron que lo patentara. Me llevó un tiempo investigar que no existiera un modelo desmontable y así decidí hacerlo. Efectivamente no había nada parecido en el mercado y pude hacerlo. Para mi es un orgullo y me gustaría producirlo en cantidad, pero mi taller no tiene capacidad”, agrega.

Para dar el gran salto, Jorge decidió inscribirse en un programa del Ministerio de la Producción de San Juan denominado “Pack emprendedores”, mediante el cual está gestionando una ayuda crediticia y un subsidio para su fabricación en serie.

La otra opción que baraja es encontrar una metalúrgica más grande que esté interesada en compartir el proyecto.

“La producción es baja y no alcanzo a cubrir la demanda. De hecho hay supermercados que lo quieren vender pero no tengo stock suficiente. Así es que espero obtener esta ayuda”, comenta Jorge.

El hobby de la metalúrgica nació de puro inquieto que es. “Siempre me di maña para estas cosas hasta que compré herramientas y mi hermana me prestó un lugar en el fondo de su casa para trabajar. Hice muchas cosas para la familia como rejas, tinglados, cerramientos, todo por iniciativa propia porque no fue a una escuela técnica. Además aprendí de Andrés quien tiene muchos conocimientos sobre este tema”, agrega.

Casi todos los pinchos se han vendido hasta ahora en la provincia, más tres en Catamarca, uno que llevaron de regalo a Bahía Blanca y otro a San Luis, pero la idea es crecer y ganar un mercado teniendo en cuenta que el asado en una pasión argentina.

Su tamaño es otro de los atractivos porque así como se puede transportar y adaptar hasta en un parrillero, permite en su estructura asar un costillar entero de más de ocho kilos o dos puntas de espalda completa por citar dos ejemplos.
 

Datos
Teléfono de contacto para Whatsapp: 264 415 9883
En Facebook: Pincho Easy Barbecue

 

 

Secretos del cocinero

 

Quien mejor que el chef Mauricio Barón para hablar del asado a las llamas, sobre todo si da los consejos necesarios para que el resultado sea el mejor. Aquí los secretos del cocinero:

* Al momento de elegir el corte de carne, recomienda punta de espalda, ojal de costilla (vacío), o tapa de asado.

* La carne puede ser solamente salada con sal entrefina (nunca gruesa porque si un grano cae al fuego estalla y puede quemar al asador). Se puede colocar un poco de aceite de oliva, o sales saborizadas con ají, pimienta, comino o nuez moscada.

* También se puede colocar en una botella, vino o aceite con una ramita de romero, orégano y ajo (o lo que cada uno prefiera), para saborizar con un pincel cada vez que se gira la carne.

* Barón aconseja preparar la estructura para el asado antes de encender el fuego para evitar quemarse alguna parte del cuerpo.

* Lo ideal es usar leña de quebracho, y para quienes quieren un sabor especial agregar una ramita de jarilla.

* El secreto para un resultado exitoso es el tiempo de cocción: Entre 2 horas y media a 3. Dependerá de la distancia entre el fuego y la carne. La paciencia es la base del éxito.

* La gran diferencia del asado a la parrilla con el asado a las llamas es que la posición vertical en la que se coloca la carne permite que la grasa se derrita tan lentamente que se introduce en los tejidos y queda sumamente blanda. Además el sabor es totalmente diferente por el ahumado de la madera.