Muy sencillo, claro y simple, sorprendente. Así resultó el balance de la conferencia sobre "La necesidad de una Segunda Revolución Verde en la Agricultura", que ofreció el alemán Manfred Kern, líder mundial de Desarrollo Sostenible de Bayer CroScience, esta semana en Mendoza, y a la que asistió especialmente invitado Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO.

Sólo 4 medios y 40 asistentes tuvieron acceso a la disertación, realizada en Luján Agrícola, el negocio de agroquímicos e insumos del campo de Carlos y Daniel Merlo, que tiene a esta prestigiosa marca como representante directo.

Gabriel Enrico, delegado técnico comercial para la zona Cuyo, nos explicó que la visita del especialista se dio gracias a su venida a Argentina con motivo de asistir al Congreso de AAPRESID, en Rosario, y como Manfred posee viñedos en su tierra, pidió conocer Mendoza por escasas horas. Algunos destacados de su conferencia:

* El alimento-combustible: será un desafío global para el siglo XXI

Dentro de los próximos 30 años, los requisitos alimentarios mundiales serán más del doble, como resultado del crecimiento de la población y los patrones de consumo que cambian de forma radical, lo que significa que tendremos que producir más alimentos en todo el mundo durante este período que durante los últimos 10.000 años juntos. En relación con los precios más altos de los alimentos, muchas personas explicarán en el futuro por qué el mundo no pudo alcanzar el objetivo del milenio de reducir el hambre a la mitad en 2015.

* Los alimentos son energía, y se requiere energía para obtener alimentos

Una visión mundial de la biomasa y de los recursos renovables basados en los cultivos para la producción y el consumo de biocombustibles para 2025 y 2050 muestra un aumento de 5 veces para 2025 y se espera que cree las condiciones para otro aumento de 5 veces para 2050. Para entonces, el uso de energías renovables comenzará a igualar el uso de los combustibles fósiles para cumplir con el crecimiento proyectado en la demanda de bienes de consumo. Los pronósticos para el 2025 enuncian que del 20 al 30% de la tierra arable se utilizará para la producción de biomasa, principalmente para la producción de bioetanol y biodiesel basada en maíz, soja, caña de azúcar, trigo, remolacha azucarera, coco, aceite de palma, girasol, colza, mandioca, pasto varilla, Jatropha y Pongamia.

* La mitigación y adaptación al cambio climático son desafíos fundamentales

Muchas personas tienden a pensar el cambio climático como algo que tendrá un impacto en el futuro, pero el calentamiento durante los últimos 20 años ya ha tenido efectos reales en los suministros de cultivos mundiales. Entre 1981 y 2002 las temperaturas más altas redujeron la producción combinada de trigo, maíz y cebada en 40 millones de toneladas por año. El calentamiento global está creando un obstáculo para la producción de los cultivos alimenticios y forrajes principales, así como para las materias primas para biocombustibles. Debemos desarrollar plantas tolerantes a sequías, inundaciones y salinidad. Globalmente, aproximadamente 95 millones de hectáreas de cultivo se manejan en siembra directa, un número que está creciendo rápidamente, particularmente por el aumento de los precios de los combustibles, el costo de las labranzas y también en vista de la creciente necesidad de reducir significativamente la emisión de gases de invernaderos.

* La tierra, recurso clave de la humanidad. El suelo es más valioso que el oro

Debemos reconocer que el suelo tiene un valor más alto que el oro. Desafortunadamente, el mundo aún no aprecia este hecho fundamental. Para los agricultores, el suelo es la fuente de nuestro alimento, el futuro de la humanidad. Pero para el mundo urbanizado, el suelo sólo es tierra, barro y nadie tiene una comprensión adecuada del mismo. No olvidemos la siguiente advertencia de un trozo de sabiduría expresado en palabras hace 3.500 años: Nuestra supervivencia depende de este puñado de tierra. Consérvalo y hará crecer nuestro alimento, nuestro combustible y nuestro refugio y nos rodeará de belleza. Abusa de él y el suelo colapsará y morirá, llevándose consigo a la humanidad.

* La higiene/seguridad alimentaria y la calidad de los alimentos: base de la cadena mundial de alimentos

La producción mundial de productos de ganadería en 1995 era de 200 millones de toneladas y aumentará a 350 millones de toneladas en 2025; 150 millones de toneladas serán carne de cerdo; 130 millones de toneladas, de carne de aves de corral; 70 millones de toneladas, de carne vacuna. La higiene alimentaria, los insumos de carne roja, blanca y procesada en relación con la salud humana, las enfermedades crónicas humanas, el envejecimiento y el impacto en la duración de la vida serán factores clave de la industria ganadera en el futuro.

* Precios, por efecto globalización

Un ejemplo: sequía en España, helada en China, huelga en Argentina, inundaciones en China, crisis económicas mundiales y otros factores desconocidos. No menos importante, en el futuro habrá una competencia mundial creciente entre diferentes cadenas de valor basadas en los cultivos. Cadenas diferentes están buscando nuevos y antiguos mercados de alimentos, forrajes, fibras, biocombustibles y productos industriales. Todo este conjunto desafiará a los sistemas de producción agrícola en todo el mundo.