Al tratarse de un dulce, su ingesta en exceso afecta la salud. A pesar de ello, así como por ejemplo su origen no es claro, ya que muchos son los países que se disputan ser los dueños del dulce de leche, también rondan en torno a este manjar algunas teorías que aclararemos a continuación.

“Si no lo guardas en la heladera se va a echar a perder”

Es curioso como el pote de dulce de leche sale de la estantería del almacén o supermercado para terminar en la heladera, como si al abrirlo lo tuviéramos que mantener refrigerado para que no se descomponga.

Al ser un producto con una alta cantidad de azúcar, contiene poca agua, lo que evita que microorganismos se desarrollen en él, por lo que es ideal para conservar a temperatura ambiente, dentro de la alacena.

Si se guarda en la heladera no pasa nada malo, solo que el dulce puede ser un poco más difícil de manejar a la hora de untar, por ejemplo.

“No como dulce de leche porque engorda”

Este alimento aporta carbohidratos, proteínas y grasas, por lo que se lo considera un alimento energético. Estas características llevan a que su consumo sea con moderación, ya que aporta unas 60 calorías por porción, que vendría a ser una cucharada sopera, donde la mayoría será azúcar.

En el caso de los niños, el dulce de leche es considerado como una buena fuente de energía, calcio y proteínas de alto valor biológico muy importantes para la etapa de crecimiento.

“El dulce de leche es muy dañino para los diabéticos”

Por su alto contenido de azúcar, el dulce de leche no es uno de los dulces más recomendados por los médicos para pacientes diabéticos, pero existe una alternativa para poder darse un gustito.

El dulce de leche dietético reemplaza el azúcar por edulcorante o stevia y algunas marcas reemplazan la leche antera por una desnatada. Esta variedad aporta unas 45 calorías por cucharada sopera y es el más indicado para personas con sobrepeso y diabéticos, siempre que sea autorizado por el especialista, quien determinará también las cantidades en el caso de aprobarlo.

“Si como dulce de leche me salen granitos”

Tanto el yogurt como la leche, el queso, la leche condensada y por supuesto el dulce de leche son alimentos son ricos en grasas, por lo que aumentan la grasitud de la piel.

Si quieres consumirlos, pero evitar la aparición de acné o granitos, es mejor elegir versiones descremadas y sin lactosa.  

BONUS TRACK

Un tipo de dulce para cada situación

Quienes saben de dulces afirman que un buen dulce de leche tiene que ser brillante a la vista, no debe ser de aspecto arenoso o harinoso, debe estar libre de impurezas y su color debe ser marrón cobrizo. Una vez en boca, se debe fundir bien.

Si buscamos, podemos encontrar tres grandes familias de dulce de leche, cada uno con una finalidad específica.

Familiar: Es el que comúnmente encontramos en almacenes y supermercados. Su consistencia es liviana y suave. Es ideal para untar, acompañar con frutas, en postres o comerlo a cucharadas.

Repostero: Es un dulce de leche que presenta una consistencia densa y su color es más intenso. Esta familia de dulce se utiliza más que nada en el mundo de la pastelería y en la preparación de algunos postres.

Confitero: Es aplicable en donde se requiera un producto con más cuerpo. Por ejemplo, es Ideal para relleno de alfajores, conitos y masas finas, entre otros productos.