Escriben todos y sobre todo. Así son las redes sociales, la nueva vidriera que estrecha lazos a nivel global y genera posibilidades de comunicación ilimitadas. La minería no fue ajena a esta tendencia y son numerosas las páginas de Facebook o los Twitter que diariamente se generan, a favor o en contra, sobre esta industria. La pregunta de fondo es: ¿sirven las redes sociales para formar opinión respecto de la minería? En San Juan, y según una serie de especialistas consultados por CUYO MINERO, la respuesta es no.
Expertos locales consideran que esto es así porque el sanjuanino promedio aún prefiere los medios tradicionales al momento de informarse sobre algo, en particular por la veracidad de las fuentes. Por otra parte, menos del 20 por ciento de la población local tiene acceso a las redes sociales. Según datos recientes generados desde la Coordinación de Gobierno Electrónico de la Provincia, 48.373 usuarios de Internet entre 12 y 70 años tienen perfil de Facebook en San Juan, siendo esta red la más utilizada. “Hoy por hoy no creo que el argentino y el sanjuanino en particular, que usa las redes sociales, pueda formar opinión a través de una red social. Todavía somos muy tradicionalistas con respecto a lo que creemos y no creemos en cuanto a la información que se publica por Internet. Si una persona publica algo sobre lo que dice saber en una red, eso no le da validez suficiente, por eso se necesita de las fuentes”, detalló Natalia Díaz, titular de la cátedra Nuevas Tecnologías de la carrera de Comunicación Social en la UNSJ.

Según la académica, el anonimato y desde allí la posibilidad de generar identidades ficticias, tiene mucho que ver. Es por eso que los medios tradicionales como la TV, la gráfica y la radio (en ese orden) son actualmente considerados como los más creíbles y por tanto, más influyentes en la formación de opinión. Extrapolado a otro ámbito pero un ejemplo claro de ello, fue la muerte de Osama Bin Laden unos meses atrás. Sohaib Athar, un usuario de Twitter con el nick ReallyVirtual y testigo inesperado, fue el primero en dar a conocer la noticia; sin embargo, la información alcanzó legitimidad cuando Barack Obama lo confirmó en vivo ante los medios de comunicación.

Por otra parte, hay que considerar los grupos etarios de los usuarios de Internet que en San Juan usan Facebook y desde ya, la correspondiente segmentación de intereses que esto genera. De acuerdo a estadísticas de la Coordinación de Gobierno Electrónico, 36.736 son los usuarios de entre 12 y 28 años, 11.275 los que están entre los 25 y 44 años, y 362 los que están entre los 45 y 70. En este marco, resulta evidente que el grupo mayoritario es el de los adolescentes y jóvenes, grupo en el que la minería como tema de interés es mínima o prácticamente nula. “Los adolescentes acceden sólo para conseguir amigos y lejos les va importar la minería, hay un porcentaje que tiene un nivel académico que sólo se conecta con gente de otras universidades, en definitiva se trata de un caudal de gente que según los intereses se segmenta cada vez más. Desde esta perspectiva podemos agregar que al que le va a interesar la minería en Facebook, es el mismo que se interesa por informarse a través de la versión digital de los diarios”, explicó Julieta Galleguillo, comunicadora e integrante del Área de Contenidos del Portal Web del Gobierno de San Juan y quien como tal, realiza un seguimiento constante de los usuarios de Internet y las redes.

Cambio de hábitos

Lo que nadie duda es del infinito potencial de las redes sociales como herramienta para la comunicación. La cantidad de usuarios a escala global y su penetración en diferentes tipos de públicos, hizo que fueran incorporadas por las empresas, gobiernos, instituciones, ONG y desde ya, los particulares con sus propios intereses. Sólo para tener una idea de la dimensión del fenómeno, el promedio diario de Twitter en 2010 fue de 55 millones de twits por día.

En minería y en los últimos meses, los ejemplos más trascendentes tuvieron que ver con las convocatorias en defensa o en contra de la actividad. En San Juan, en septiembre del año pasado y a raíz del tratamiento de la Ley de Glaciares, más de 4.000 personas entre operarios, empresas y proveedoras de servicios, se convocaron en torno a la plaza principal para revindicar a la minería y defender sus fuentes de trabajo. El uso de Twitter sumó a una convocatoria que empezó con e-mails y mensajes de texto. Del otro lado de la vereda, en Mendoza, más de 3.000 personas se reunieron a principios de este año para marchar en contra de la aprobación del proyecto cuprífero San Jorge, en Uspallata. La convocatoria trascendió a través de las redes y hay numerosos videos al respecto subidos en You Tube.

Para Gustavo Jury, licenciando en Comunicación Social y docente de esta carrera en la UNSJ, “el uso de la red social en la minería tiene un efecto importantísimo porque como actividad humana, es pasible de que sea un tema a tratar, a favor o en contra. Creo que el efecto que más se ha manifestado tiene que ver con que estas tecnologías fomentaron nuevas formas de organización entre personas que abrazan una misma causa en distintos puntos geográficos, entonces, ninguna empresa o institución puede dejar de valorar estas redes”. En este sentido, el tema minería y medioambiente abordado desde diferentes aristas y siempre con polarización, es el que más acapara la atención entre los usuarios.
En cuanto a las empresas en San Juan, Barrick es la que por el momento incursionó en el uso de estas tecnologías como un medio hacia la comunidad. Desde 2008 la compañía sumó un blog (www.construyendodialogo.com) y los perfiles en Twitter (@minerabarrick) y Facebook (http://www.facebook.com/barrick.gold.sudamerica), donde dialogan sobre las inquietudes y sugerencias que tenga la comunidad online respecto a la empresa y la minería. Al respecto, Rodrigo Rojas, Coordinador Regional de Comunicaciones Web de Barrick, explicó: “El uso de estas herramientas nos permitió dar a conocer nuestras acciones desde una perspectiva objetiva y real, generando un sentimiento de comunidad online en torno a Barrick, con opiniones de expertos, conocedores y también gente común que ha ido entendiendo el quehacer de la minería y los beneficios que ésta conlleva”.

La tendencia llegó también a esferas universitarias. Grupo Aportes, una ONG que reúne a académicos de universidades nacionales y de organismos científicos e investigación vinculados a la minería, ya prepara su red con el fin de hablar sobre la actividad y buscar el esclarecimiento del tema, desde una visión académica. Marcelo Bellini, vicedecano de la Facultad de Ingeniería de la UNSJ y uno de los socios fundadores de Aportes, confirmó a CUYO MINERO que la red estará on line a fines de agosto próximo.