María Julia Aguiar en uno de los torneos argentinos

El imaginario popular aún conserva el mito que vincula al baile del caño sólo con lo sensual, sin embargo desde hace mucho tiempo es considerado un deporte mundial que pelea para tener categoría olímpica. Lejos de lo meramente erótico está relacionado con un gran disciplina en la que intervienen la acrobacia, los líneas perfectas del cuerpo, la flexibilidad, la fuerza muscular, entre otros que incluyen la calidad coreográfica. San Juan no está ajena a esta tendencia mundial, por el contrario está muy bien posicionada gracias a María Julia Aguiar (31), la sanjuanina bicampeona argentina y sudamericana que se prepara para competir en el mundial de octubre en España. Radicada en Buenos Aires, decidió dejar su profesión vinculada a las Ciencias Económicas para dedicarse de lleno al Pole Dance.

– ¿Cuándo comenzaste con el Pole Dance?

Estaba viviendo en Córdoba porque allí estudié Ciencias Económicas, y una noche viendo tele vi que en el programa de Tinelli habían incluido el baile del caño y me llamó mucho la atención. Así empecé a buscar una escuela de Pole pero recién a los tres meses encontré una cerca del departamento. Fui pensando que era algo más bailado, divertido y lo tomaba medio en chiste y cuando llegué a la primera clase me di cuenta que era una disciplina acrobática. Desde ese momento me encantó. Primero fue un hobbie, lo hacía dos veces a la semana, y a los 9 meses de estar entrenando me presenté en el torneo provincial de Córdoba. Me fue muy bien y decidí empezar con las rondas de competiciones. Luego pasé a un argentino, pero las primeras veces era tan nueva que sacaba tercero o cuarto puesto, hasta que en los dos últimos años logré el título de Campeona Sudamericana en 2015 y 2016, siempre compitiendo como sanjuanina obviamente.

– ¿Y qué pasó con tu carrera universitaria?

La terminé y comencé a trabajar en empresas, primero cuatro horas, luego seis y así hasta 8 o 9 horas por día. A la par entrenaba pero llegó un momento en que se me comenzó a complicar y me sentía muy agotada físicamente, pero me gustaba tanto que no quería dejar de hacerlo. Por otra parte el trabajo era mi medio de vida, así es que no podía decidir. Eso fue hasta que recibí una propuesta de Art Dance Studio de Buenos Aires que es donde estoy ahora. Me propusieron venir a trabajar para poder dedicarme al pole, entrenar, competir y dar clases . Me costó decidir porque acababa de terminar la carrera luego de muchos años de estudio y tenía que dejar todo para dedicarme a otra cosa. Me asustaba un poco dejar de trabajar en el sistema con una cobertura y la seguridad de cobrar a fin de mes para pasar a ser profesora de caño, pero me animé y lo hice. Acá hay tanta gente que hace pole que pude lograrlo. Lo mejor es que tengo tiempo para dedicarle al entrenamiento y al armado de coreografías que demanda mucho esfuerzo.

¿En que año fue eso?

En el 2014.

¿Tus clases sirven para tu entrenamiento personal, o además debes sumar tiempo extra?

Sí debo dedicar más tiempo, así es que lo que hago es entrenar por la mañana la parte física, la de flexibilidad y armado de coreos y por las tardes doy clases. Además trato de administrar la energía para que el cuerpo aguante.

 

– ¿Tenés algún plan de alimentación especial?

Primero no le daba mucha importancia a la alimentación porque mi contextura es chica, podía comer lo que quería y estaba todo bien. Pero luego de un año de duro entrenamiento tuve una fractura en la mano y el médico me dijo que debía hacer tres cosas fundamentales: dormir ocho horas, comer bien y entrenar por la mañana. Así decidí comenzar con una alimentación propia de un deportista. Fui a un nutricionista que me indicó que alimentos debía consumir, cuáles son buenos para la recuperación del músculo, qué debía comer durante el día y qué cosas por la noche. Desde entonces cambié mis hábitos, por ejemplo la cena que antes la hacía a las 10, o más, ahora la hago a las 7 u 8 de la tarde.

– ¿Desde qué edad se puede comenzar a practicar pole y cuál es la edad límite?

Es un deporte que lo pueden hacer tanto hombres como mujeres y de todas las edades. Si llega alguien que nunca hizo nada en su vida, cualquiera sea la edad, comienza de cero, practica ejercicios aptos para cada caso. En cambio si llega alguien que hizo algo de deporte le puede resultar un poco más fácil. Por ese motivo tengo alumnas de todas las edades, incluso en las competencias las categorías se dividen por edades, hay nenas desde 9 o 10 años. La categoría más alta de competición es más de 40, pero hay muchas de 50 que se presentan a competir y están perfectas. 

– Supongo que cuando alguien llega a la primera clase lo que menos hace es caño, ¿o no?

Siempre advierto que es muy difícil, es doloroso para la piel porque te quedan moretones al principio por la fricción con la barra, pero se empieza por ejercicios más bailados, giros en el piso con el caño. Recién cuando el alumno adquiere más fuerza se le enseña a trepar y hacer cosas arriba.

-¿Hace falta tener conocimientos de danza?

No necesariamente. En mi caso tengo un background porque fui a estudio Uno cuando era chiquita y eso me ha servido muchísimo porque obviamente la danza te da muchas cosas, entre ellas las líneas, la musicalidad, me ayuda al armado de coreografías. Pero es muy poca la gente que llega de la danza, en general vienen de otros deportes.

-¿Cuál es el circuito que debe hacer alguien que quiere competir y escalar posiciones?

Primero se comienza por los torneos provinciales como el que se hace dentro de pocos días en San Juan. Así de cada competencia se seleccionan las ganadores y a fin de año, en diciembre, nos encontramos todos en Buenos Aires en el Sudamérica Pole Championship. No solo la gente de Argentina sino de toda Sudamérica. En los dos últimos años gané tanto el torneo argentino como el sudamericano.
 

– San Juan tendrá en unos días un Pole Sport regional.

Si, Daniela Bazán es la directora que lo organiza e incluye otras provincias como Mendoza y San Luis porque no todas tienen el torneo. Este año no voy pero me encantaría hacerlo. El primer año fui jurado de ese certamen. Es muy bueno.

– ¿Y ahora qué competencias debes enfrentar?

El 13 y 14 de octubre voy al campeonato mundial en Mallorca, España, como representante de Argentina. Para clasificar a esta instancia cada país tiene un torneo que se llama Pole Teatro lo que implica que uno debe tratar de contar una historia. Yo me presenté en el país haciendo una coreografía representando a Frida Calo y así obtuve el primer puesto. Eso me clasificó para representar a la Argentina en el mundial. Fue muy interesante porque el Pole se vive muy diferente en lo competitivo, hay que generar y desarrollar ideas que es lo que más me gusta.
 

– De alguna manera ¿Tinelli ha sido el promotor de esta actividad?

Es mucho más interesante que lo que uno puede ver en Tinelli. Lo que reconozco es que al ser tan masivo llegó a despertar el interés de muchas personas, pero él lo explotó más desde lo erótico y no desde lo deportivo.

 
¿Quién te ayuda económicamente para participar a nivel mundial?

Presente una nota en la Secretaría de Deportes de San Juan y me han contestado afirmativamente. Estoy muy feliz que mi provincia me apoye, estoy muy agradecida y contenta.

San Juan sede

Por quinta vez consecutiva, la provincia será sede del Pole Sport que comprende no sólo a San Juan, sino también Mendoza, la Rioja y San Luis. Es organizado por AcroEstudio. Participarán cerca de 40 acróbatas de todas las edades y contará con un jurado nacional e internacional. Los ganadores pasarán luego a una instancia nacional en Buenos Aires.
El encuentro será el 5 de agosto en el Auditorio del Teatro del Bicentenario a partir de las 16,30. Más informes en www.acroestudio.com

 

Fotos: Gentileza María Julia Aguiar