Por: María Inés Montes, presidenta de Rosicultura Filial San Juan 
Fotos: Colaboración de la Sra. María del Carmen Barceló, rosicultora. 
 
De origen remoto, estas flores son cultivadas por el hombre, que no cesa de recrear su belleza y su simbolismo, ni de cantar sus hechizos y procurar sus mutaciones. Es la razón de todos los aficionados al cultivo de esta hermosa planta que muestra no solo su belleza sino también sus bondades y aromas. Y, queda demostrado con la labor de la rosicultora María del Carmen Barceló, digna de pasión y amor a la rosa, una planta que deja el alma llena de satisfacciones. Tesón, trabajo y estudio fue lo que llevó a esta señora ha adornar los semejantes tanques de combustible y la estructura de la empresa, cultivando y formando sectores de jardines con diferentes variedades de rosas. El trabajo comenzó el 2015 con la plantación de rosales híbridos de té y tuvo todo listo para la reciente inauguración. Un paseo por los sectores para recordar, estudiar y deleitarse acompañado del mejor perfume que transmiten.