Juan Estanislao Maurín nació en San Juan en 1844 adquiriendo una esmerada educación, sin alcanzar por eso a cursar aulas universitarias, por entregarse muy jóven al comercio. desde temprana edad comenzó a actuar en la vida pública, pues a los 17 años se alistó en el ejército de Antonino Aberastaín para enfrentar la invasión de Sáa en La Rinconada, Pocito, generandose una sangienta batalla donde muere Aberastaín y su hermano Saturnino Maurín.
Cuando llega a la mayoría de edad constituye el 7 de mayo de 1867 la sociedad comercial +Juan Maurín y Cía+, asociado con Cecilio Barbosa y Cármen Frías de de Sandes, una actividad que duro muchos años.
El precoz comerciante se dedicó al cultivo de la vid y a la producción de vino que todavía era muy incipiente. Observando Maurín las buenas perpectivas del vino en el país, se asoció con otro sanjuanino,Vicente R. Serú y con Clemente uíz, para fundar los tres +un importante establecimiento comercial e industrial en nuestro medio, cuando todavía el ferrocarril no llegaba a San Juan+ tal como lo describe el historiador Cesar H. Guerrero en su libro +Sanjuaninos del Ochenta+.
Maurín se las arreglaba para llevar sus productos al norte y al litoral argentino en tropas de carros fletadas por la misma sociedad. Esta fué una notable industria en la provincia ya que no solamente se ocuparon de transportar vino, sino también fruta seca, semilla de alfalfa y cereales o productos de insdustrias caseras muy abundantes por entonces en nuestro medio como tabletas, dulces, arrope de uva y miel de abejas, etc. Sus establecimientos iniciales estaban en el departamento Pocito.
Emilio Maurín Navarro en su libro +Contribución al Estudio de la Historia Vitivinícola Argentina+ señala que en tal forma los señores Serú, Maurìn y Ruíz fueron antes de la inauguración del ferrocarril los primeros exportadores de vinos de San Juan en gran escala. Constituyeron una de las mas importantes firmas comerciales de Cuyo transpoprtando productos de esta procedencia con destino a Buenos Aires, Córdoba y Rosario en sus propias tropas de carros. La magnitud de la empresa se evidenciaba por las agencias comerciales que tenían instaladas en Mendoza, Rosario, Córdoba, Tucumán y Salta.
Disuelta la sociedad por propia voluntad de los socios, Maurín siguió explotando la industria del vino con marcado éxito, como lo demuestran los premios obtenidos por sus vinos en diferentes exposiciones del país y fuera de él, en las cuales se presentó.
Ganó premios en las exposiciones de San Juan de 1883 y 1885 (interprovinciales); en la Exposición Continental de Buenos Aires en 1882 donde participaron vinos extranjeros y nacionales; en la Universal de París en 1889 y Mundial de los Estados Unidos en 1892. Allí obtuvo sendos premios y Diploma de Honor por los vinos presentados a las mismas. Con esto demostraba dos cosas: hacer conocer la excelencia de los vinos sanjuaninos y la perseverancia de dejar sentado tal acierto en lugares donde estaban los mejores vinos del momento.
Cuando Maurín envió sus productos a Chicago, por vez primera un vermouth producido en la Argentina se premiaba en el extranjero y por primera vez también un vino sanjuanino lograba la mas alta distinción frente a productos de distintos países en la Exposición Continental realizada en Buenos Aires en 1882.
Esto no fué mas que un anticipo de hacer conocer la insuperable calidad de nuestros licores como vermouth y Cognac. De ahí que Maurín sea un precursor de la elaboración del vino de San Juan junto a nombres ilustres como Justo Castro, Rosauro Doncél, Juan Tierney, Eladio Gigena, Vicente Cereseto, Eliseo Marenco, Antonio Maradona, Luís Doncel y Vicente Caraffa entre otros.
Esta trayectoria lo colocó en la plana de los entendidos en la materia, por lo que el Gobierno de la Nación lo incluyó en la comisión que debía organizar la gran Exposición de San Juan con motivo de la llegada del Ferrocarril Andino a la provincia en 1885. Esta comisión la componían Carlos Doncel, Daniel Aubone y el doctor Segundino Navarro a la cabeza como principal organizador. En dicha oportunidad llegó por primera vez un cuerpo diplomático y consular extranjero así como el presidente Julio A. Roca y sus ministros.
Indudablemente su múltiple actividad de agricultor, de hacendado, comerciante y de industrial no bastó para en su finca de Caucete fundara una escuela para los hijos de los trabajadores y de las inmediaciones. En el plano provincial integró una comisión especial para resucitar la Quinta Normal, donde se impartía la enseñanza técnica y fundada por Sarmiento. Integró la Comisión Asesora del Banco Nación. Gestionó un edificio para la Biblioteca Franklin en 1887.
A su iniciativa y gestiones se debe la implantación de la Oficina Química Nacional con sede en San Juan (1898).
Actuó en política y fué diputado provincial en 1875 y en 1883 fue elegido senador provincial. Fué amigo de Leandro Alem y dirigió el partido Constitucional de San Juan.
Maurín tiene el mérito de ser el fundador y primer presidente de la Sociedad Vitivinícola y de los fundadores del Club Social de San Juan. Integró la Comisión de Exposición Nacional de 1898 y Exposición Regional de 1901.
Maurin murió el 5 de enero de 1905. Su vida política hacia la gobernación quedó truncada, pero su hijo Juan Maurín (1880-1953) se convirtió en gobernador de la provincia ejerciendo el poder entre los años 1934 y 1937.
Hoy las bodegas de San Juan obtienen importantes galardones en certámenes nacionales e internacionales mostrando al mundo la calidad de nuestros productos, generando ya un reconocimiento, un camino que se inició con la primera medalla obtenida en 1882 por Maurín, conocido como +el procer del surco+.
