El espectáculo vivido el sábado pasado en el Autódromo de Zonda amerita que los sanjuaninos se detengan un poco y valorar cientos de detalles, actos, ideas, representaciones, y sobretodo el profesionalismo puesto en escena en la Fiesta Nacional del Sol 2014.
Los cerros de Zonda, que enmarcan el escenario natural del autódromo Eduardo Copello, se transformaron gracias al trabajo y esfuerzo de miles de personas y especialistas, muchos profesionales y artistas, en un espacio para disfrutar de un espectáculo de primer nivel.
Un lugar que cambia esa única noche y mágicamente logra convertirse en el lugar indicado para la actuación y el tema elegido. Un escenario para una multitud de artistas de la danza, teatro, canto; todos acompañados por la escenografía y un vestuario, que también expresan el guión de la fiesta.
Los cerros, la aridez, las piedras y cuanto obstáculo se presenta quedan conformando el mejor escenario del mundo. Gracias a ese arsenal de gente que trabajan desde que se termina la fiesta, hasta la próxima edición. Podríamos afirmar que desde el año 2009, el espectáculo de la fiesta se transformó, hay una temática y un lugar distinto: el Autódromo. Nace una nueva fiesta para los sanjuaninos. Desde aquel momento se apuesta por temáticas, pero todas poseen un detalle en común y es que cada una tiene como objeto fundamental el sol.
"Raíces de libertad. Latinoamérica, La patria grande’, fue el tema del 2014, a muchos les gustó y a otros tantos presentaron sus críticas, pero lo cierto es que independientemente de la ideología política y demás comentarios; no podemos dejar de abstraernos y ser capaces de valorar una puesta en escena de un espectáculo de semejante envergadura y que además tiene el plus de contar en pocos minutos semejante narración histórica.
La revolución por la libertad de tantos países, que junto al nuestro, somos todos Latinoamericanos, somos hermanos y es parte de nuestra identidad cultural. Titánica tarea, cuando sabemos que la historia es extensa y llevarla a cabo a través de movimientos, danzas, expresión, efectos de imágenes y luces; es real que los textos hablan.
Poder comprender que un difícil guión histórico de cinco horas transcurre en tantos escenarios en una hora y media de espectáculo, es una tarea de lujo de los profesionales de la fiesta.
Para muchos era refrescar esos momento ancestrales, para otros es aprender en pocos minutos y entender detalles de la historia que no se conocen, como por ejemplo un Che Guevara apasionado, enamorado, a través de sus cartas. Una hazaña de directores, guionistas, dramaturgos, corógrafos, escenógrafos, sonidistas, iluminación, musicalización, audiovisuales, etc.
Año a año crea en el público una expectativa y asombro que casi nadie pestañea al ver aparecer 400 artistas moverse, en un creativo escenario. Este hilo conductor lleva a la provincia y a los sanjuaninos a un nivel de excelencia. Tan es así que no solo trajo el reconocimiento a nivel nacional sino también mundial. De esta manera la parte tecnológica, tomó un protagonismo único en el mundo, propio de las ciudades de avanzada. Es un San Juan que no quedó atrás con la tecnología, y mostró a través de diferentes recursos: mapping, cámaras, efectos y sobretodo mucha creatividad que hay talento de origen nuestro. Es algo que impacta ante el ojo humano los efectos e imágenes que consiguen mostrar y hacer hablar a los cerros. Es algo inédito que bien merecido tiene el premio Récord Guiness, cuya parte técnica ya fue explicada por Diario de Cuyo en su ejemplar del día domingo 23 de febrero.
Cuando se apagan las luces y el público está ubicado y se da comienzo a la Fiesta Nacional del Sol, coloca en el corazón de todos los presentes un sentimiento claro y noble, amor por lo nuestro. Y así fue como el público presente expresó con muestras de cariño y alegría la entrada del gobernador de la provincia José Luis Gioja.
Es una fiesta donde se aprende mucho y sobretodo deja un legado a los jóvenes sanjuaninos increíble; oportunidades de realización, puertas que se abren, talentos que se reconocen, y pensar que tiene que pasar un año más para disfrutar de una fiesta que en el fondo de los corazones todos deseamos que dure más días.

