Fotos: Gentileza Vinos de Autor
Quizá en algún momento pensar en vender vinos en medio de un patio cervecero parecía una cosa de locos, hasta que sucedió. Desde hace menos de un mes tres audaces enólogos decidieron abrir las puertas de "Cava de Autor" en la cervecería Circo Beer, en plena avenida Libertador. Marcelo Onofri, Juan Camuñas y Juan Pablo Ripalta son los dueños de la idea y puesta en marcha de esta apuesta, que además incluye el primer punto del país donde se vende "vino tirado", con el mismo sistema de la cerveza.
Esta opción fue aprobada por el Instituto Nacional de Vitivinicultura a fines de octubre cuando autorizó el fraccionamiento y venta al público de vino en envases de acero inoxidable, como ya ocurre en otros países. La iniciativa apunta a brindar salidas al consumo de vino que está en baja, frente a su competidor, la cerveza.
Inmediatamente reglamentado el marco legal, pusieron en marcha una idea que ya venían pensando desde hace un tiempo. Es que estos profesionales son los mismos que iniciaron el camino de los vinos de autor (aquellos cuyo proceso está cuidadosamente controlado por el enólogo desde la plantación de la uva hasta su producción y venta. En general llevan la firma del autor en la etiqueta y son partidas limitadas).
"Nosotros hacíamos degustaciones de nuestros vinos en diferentes lugares, hasta que en un momento determinado acordamos hacer una en Circo Beer y anduvo muy bien. Sus propietarios nos propusieron tener un espacio para colocar un wine bar y vinoteca y comenzamos a trabajar. Este lugar nos ha planteado varios desafíos, uno de ellos, descartar el mito que el vino y la cerveza son enemigos. Nuestra idea es compartir el público y que éste tenga la libertad de elegir lo que quiera", cuenta Marcelo Onofri.
Sin duda es ideal para aquellos amigos, familias o parejas que no comparten el mismo gusto etílico, o sólo tienen ganas de elegir una u otra cosa. La gente que visita este sitio gastronómico tiene la libertad de comprar por un lado la comida, por otro el vino o la cerveza, y llevar a su mesa lo que quiera.
"Esta propuesta tiene dos facetas, la de wine bar y la de vinoteca. En esta última tenemos a la venta nuestros vinos de autor -Violinista, Finca Camuñas y Roble Negro-, que la gente puede comprar en botella o caja al mismo precio que en cualquier vinoteca, y el vino en botellones de dos litros para llevar. De esta manera se gasta mucho menos dinero".
Vino tirado
Si bien en el wine bar se puede comprar vino en copa directamente del dispenser que mantiene los vinos a temperatura, un sistema usado desde hace tiempo que permite dejar al vacío la botella cada vez que se sirve, la novedad son los botellones y el vino tirado.
Precisamente el INV aprobó última opción luego de estudios realizados que determina que "los envases de acero inoxidable son recipientes que permiten mantener al vino bajo una atmósfera inerte, evitando alteraciones y conservando las características físico-químicas y organolépticas del producto original".
Para poder ofrecer este servicio, es necesario un sistema de extracción, que incluye además del envase, el conjunto de reguladores, picos, mangueras, conectores, canillas, válvulas, gases y todo otro elemento que posibilite el servicio directo.
"El vino está en un barril de acero inoxidable que se empuja con gas carbónico. Yo venía trabajando en este tema hace alrededor de un año, así es que a partir de que el INV aprueba la venta de vino en barriles de acero inoxidable, decidimos incorporarlo. Esto provoca que el vino salga con una pequeña burbuja y una frescura muy rica. Además contamos con canillas que suman espuma, así es que cuando se sirve la copa, la mitad es vino y la otra espuma", explica Marcelo.
Esta metodología ya se usa en otros países del mundo para beneficio del consumidor y en definitiva de la cadena vitivinícola.
En esta primera etapa, cuentan con dos vinos tirados, uno blanco dulce y uno rosé -ideales para beber con un leve gasificado-, fáciles de tomar, sencillos y bien frescos ya que esta tecnología permite tenerlos a la temperatura óptima.
Desde un comienzo decidieron que el vino tirado sería distinto a lo que ofrecen envasado y acorde a la estación del año, pero siempre conservando la autoría de sus propietarios. En este momento el autor de los vinos de barril es Onofri.
Para motivar el consumo también adoptaron metodologías similares a la de la cerveza como los happy hour y promociones de dos copas por cien pesos por citar dos ejemplos.
El wine bar está abierto todos los días a partir de las 19 hasta las 3 de la madrugada aproximadamente.
Valor agregado
El wine bar comparte la carta de comidas rápidas y platos gourmet de Circo Beer, aunque a la par sus propietarios están desarrollando nuevas opciones para maridar con vinos.
Otro aspecto interesante es que los curiosos están de parabienes ya que allí siempre está presente alguno de los autores de los vinos para responder todas las inquietudes y dudas que puedan surgir.
"Para sorpresa nuestra, muchos jóvenes que van al patio cervecero, pasan por el wine bar prueban el vino y terminan comprando. Es impresionante la aceptación de los más jóvenes". Marcelo Onofri.
Precios
En copa (generosa)
- Vino tirado: 70 pesos.
- Vino varietal blanco -Viognier, Pinot Gris y Torrontés-Sauvingnon Blanc-: 80 pesos o dos 150 pesos.
- Vinos tintos jóvenes -Malbec, Syrah, Cabernet Sauvignon-: 100 pesos
- Vinos reserva – Violinista Cabernet Franc, Finca Camuñas Malbec y Reserva Roble Negro: 150 pesos
Referentes
Otra de las metas de la Cava de Autor es abarcar la mayor cantidad de varietales y gran parte de las zonas vitivinícolas por lo que ya cuenta con Pinot Gris y Viognier de Pocito; un Torrontés/Sauvignon Blanc que es un blend de Pedernal y La Bebida.
En tintos también hay de diferentes zonas: Pocito, Calingasta, Pedernal y La Bebida.
‘Nuestra idea es convertirnos en referentes de todos los valles para que el turista que se acerque pueda tener una idea de las características de cada zona, además de probar estilos diferentes de vinos’, indica Onofri.
En este espacio también se desarrollarán degustaciones, master class, entre otras acciones que apuntan a conocer más y a convertirse en operadores turísticos.
Casimiro Roble
El primer vino que quedó incorporado a la carta, además de las marcas de los propietarios de la Cava, fue Casimiro, presentado este último jueves en las instalaciones del wine bar. Se trata de otro vino de autor ya que éstos serán los únicos que podrán sumarse a la carta para conservar el estilo.
Casimiro Roble 2018, un Malbec elaborado por el enólogo Emiliano Lorenzo en Calingasta, con uvas cultivas justo frente al cerro Alcázar a más de 1400 msnm. Cuenta con un pequeño porcentaje de Syrah y Merlot para lograr un atractivo diferente. Pasó sólo 3 meses por madera de roble. Un varietal de altura para probar y empezar a conocer los nuevos productos de San Juan.