La producción total de bebidas acumula una merma del 5,3% en el primer cuatrimestre de 2017 con relación a igual período de 2016. El consumo total de bebidas (en hectolitros) verificó un retroceso del 4,5% en el acumulado a abril. La menor caída en el consumo con relación a la producción en el corriente año se vincula al fuerte aumento de las importaciones, asegura un informe de Investigaciones Económicas Sectoriales.
Al analizar las ventas totales por segmento, las bebidas gaseosas y los vinos fueron los de peor desempeño en el primer cuatrimestre de 2017. En cambio, el segmento de cervezas se diferenció del resto de las categorías al verificar una suba del consumo en los primeros cuatro meses de 2017, a pesar de que las ventas de cervezas arrastraban tres años consecutivos de caídas.
En el primer cuatrimestre de 2017, las exportaciones totales de bebidas fueron de U$S 281 millones, una baja del 9,3% respecto a igual período de 2016, mientras que los volúmenes despachados (106,3 millones de litros) cayeron un 17% en este período debido, principalmente, a las menores ventas de vinos.
Las importaciones de bebidas en el primer cuatrimestre de 2017 mostraron una importante suba del 156%, al registrar compras por un total de U$S 67 millones, mientras que en cantidades treparon un 633% al totalizar 82 millones de litros. El principal rubro de importación en este período en valores fue el vino (para abastecer el mercado ante la mala cosecha de uva).
Para Alejandro Ovando, Director de IES Consultores "las perspectivas para el sector de bebidas no son alentadoras para el año en curso desde el punto de vista de la producción y de las ventas, ya que los niveles de consumo permanecerán lejos de del trienio 2012-2014".