Dinámico, enérgico, constante y colaborador, son algunos de los adjetivos que le caben a Leonardo Toia, Supervisor de la Brigada de Emergencia de Veladero. Este experimentado bombero voluntario y auxiliar enfermero oriundo de Río Tercero, llegó a la provincia de San Juan casualmente por una promesa que su mujer debía cumplir a la Difunta Correa. Actualmente ya radicado en la provincia, dedica su tiempo libre a capacitar distintas agrupaciones y ONG locales en materia de rescate y emergencias. Desde hace casi un año atrás, enseña tareas de salvamento con cuerdas a los miembros de la Cruz Roja. A su vez, durante cinco meses trabajó junto al grupo de parapentistas de la provincia en materia de socorro médico, equipamiento necesario y tareas de asistencia de tabla para fractura, corte y vendajes. “No es mucho el tiempo libre que me queda con el trabajo de la brigada de emergencia, pero el poquito que queda, lo dedico a brindar cursos y capacitar en materia de seguridad, rescate y demás, a quien lo necesite.

Por lo general con los chicos de la Cruz Roja lo hacemos los viernes en la noche y con los parapentistas los sábados o domingos en la mañana. No son horarios muy normales, pero es lo que me queda luego del trabajo y la familia”, explicó Leonardo.

El experimentado rescatista que actualmente custodia los caminos de la mina Veladero y el proyecto Pascua Lama explicó que su vocación por las emergencias siempre se basó en la curiosidad, la adrenalina y la voluntad de ayudar. Esto lo motivó a estudiar para paramédico en la Fundación IDEM en la Ciudad de Córdoba Capital, cuando esta fundación tenía un programa piloto igual que el que se aplica en Estados Unidos.

“Trate de terminar, pero eran muy altos los costos para viajar y estudiar, así que no pude concluir el tercer año en esta formación”. Sin embargo, el 2001 y por medio del gremio de ATSA pudo realizar el curso de auxiliar de enfermero, ya que así lo exigía el Ministerio de Salud de Córdoba para trabajar en los Sistemas de Emergencias Médicas de dicha provincia. A su vez, ese mismo año el cuartel de bomberos al que pertenecía comenzó con el Centro de Entrenamiento para Brigadas de Emergencias. Fue en esta institución donde Toia perfeccionó sus tareas de rescate, cursos de rescate en altura, rescate en espacios confinados y rescate vehicular. “Desde que comencé fui fanático de la emergencia. Siempre digo que esta me formó, me enseñó y sobre todo me ayudó en muchas cosas básicas de mi vida. Incluso en la formación de mi familia. Y ahora gracias a la emergencia puedo mejorar la calidad de vida de mi familia e hijos”, comentó Toia.

La vida trajo a este brigadista a la provincia de San Juan ya que su esposa debía cumplir una promesa a la Difunta Correa. “En esos días que nos quedamos en San Juan mi cuñado me mostró un aviso donde se buscaba brigadistas para Barrick. Apliqué y me llamaron. Estaba un poco indeciso porque en primera instancia la oferta económica no me conformaba y también había sido seleccionado de entre cientos de enfermeros del país para trabajar en la Central Nuclear de Embalse”, comentó el rescatista. Y concluyó: “A los pocos días de la entrevista me llaman de Stracom, otra empresa contratista de Barrick para un puesto de supervisor en la brigada de camino y arregle para quedarme. Es así que desde febrero del 2006 estoy en Veladero trabajando”.