Desde septiembre del año pasado, el Colegio Central Universitario "Mariano Moreno" es parte de un proyecto internacional vinculado al idioma alemán. Todo un privilegio, si se tiene en cuenta que es la única escuela de la provincia que fue elegida para integrarse a la iniciativa de la que tan solo participan 7 establecimientos educativos argentinos y 500 de otras partes del mundo. Se trata de "Los colegios, socios para el futuro", una red de escuelas donde se enseña esta lengua pero también se difunden nociones culturales y sociales a través de herramientas -que incluyen materiales y viajes- que financian desde el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania e instituciones como la Central de los Colegios en el Extranjero (ZfA), el Goethe-Institut, el Servicio de Intercambio Pedagógico de la Conferencia Permanente de los Ministros de Educación y Cultura de los Länder en la República Federal de Alemania (PAD) y el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD).
Tan es así, que la semana pasada y para poner en marcha el proyecto llegó desde el corazón de Europa, una donación que incluía mobiliario para acondicionar un aula (sillas, mesas y aire acondicionado), 7 notebooks (1 exclusiva para los docentes y el resto para el dictado de clases ecológicas, lo que es igual a limitar el uso de papel), una impresora, un televisor pantalla plana gigante, decenas de libros que incluyen material de estudio pero también cuentos, diccionarios y novelas, además de DVDs con películas y proyecciones e inclusive juegos didácticos para practicar el idioma. Realmente, tanto los alumnos del Ciclo Básico (de 1º a 3º año donde eligen el alemán, entre otros idiomas como segunda lengua de la currícula obligatoria) y los del Ciclo Orientativo (los últimos años del secundario que tienen la chance de recibir clases en forma optativa) son la envidia de todo el establecimiento, ya que ninguna de las aulas puede igualársele.
La elección del Central para ser incluido en la iniciativa, no fue aleatoria. Había un antecedente importante: es que en esta escuela dependiente de la Universidad Nacional de San Juan hace por lo menos quince años que se dicta el alemán. En un principio, eran talleres que los alumnos podían elegir voluntariamente participar o no. Con los años, se convirtió en una materia más para los primeros años del ciclo educativo. "Fue toda una apuesta de la UNSJ y en particular del Central por seguir adelante con el aprendizaje del alemán, ya que la misma propuesta de talleres se llevaba adelante en las EPET pero la ley de emergencia económica impuesta por el gobierno en la década del ’90, hizo que se terminaran", contó Karin Braun, una de las docentes que encabeza el proyecto.
Así es que tan solo el CCUMM quedó en el camino y fue motivo suficiente para integrarse a la red de colegios que alientan el aprendizaje del alemán, entre los que están la Escuela Alemana Moreno (de Buenos Aires), la EET N° 24 "Simón de Iriondo" (Resistencia, Chaco), la Provincia de Misiones (Misiones), la EET Nº 2 "Obispo Colombres" (Tucumán), como representantes de Argentina.
De paseo por tierras germanas
Uno de los caballitos de batalla del proyecto "Los colegios, socios para el futuro" es dar la posibilidad a los estudiantes de conocer Alemania y poner en práctica sus conocimientos in situ. Así fue como, luego de rendir un examen internacional (para acreditar al menos un nivel básico de idiomas) y quedar seleccionadas entre otros nueve sanjuaninos, Julieta Tello, Julieta Pavet y Julieta Ortiz -todas de 6º año pero de diferentes orientaciones- armaron sus valijas y se marcharon con rumbo a Frankfurt y Heildelberg por 3 semanas.
"Fue una experiencia única. Al principio entendíamos todo lo que nos decían pero no podíamos articular ni una palabra. Con los días nos fuimos soltando y hasta inclusive incorporamos vocabulario. Ahora queremos seguir estudiando", coinciden las chicas quienes junto a otros 80 compañeros -de distintas partes del mundo, como ser Colombia, Rusia, Brasil, Australia, Chile, Bolivia, Ucrania, Urbegistán, entre otros- tomaban clases de mañana, salían de paseos por la tarde, iban al cine o a hacer actividades recreativas por la noche. Además de recorrer el país europeo, las estudiantes (que no tuvieron que pagar ni un peso en toda la estadía) pudieron tomar contacto con los lugareños y sus costumbres pero también conocer sobre la política de la región, ya que en los días que viajaron se llevaban adelante elecciones municipales.
Ellas no fueron las únicas que viajaron en el marco del proyecto. En diciembre pasado, un grupo de alumnos -Leonardo Noguera, Joaquin Giacone, Josefina Conde, Nitza Schoenfeld- participaron del campamento de intercambio entre estudiantes de colegios del programa PASCH de la Argentina. Fue en Villa General Belgrano, en Córdoba. Toda una experiencia, que se suma a la que vivenciaron las docentes Ana Marina García, Verónica Clavijo y Mónika Kurbán (que pese a trabajar en el Goethe de San Juan, colaboran con el proyecto) que se capacitaron y perfeccionaron en colegios e institutos de las ciudades de Göttingen, München y Freiburg.
Parece ser que el proyecto está dando sus frutos: en el 2009, hay 28 alumnos de 1º año -todo un record- en carrera para hablar alemán en Alemania desde el Central Universitario.

