Reginaldo Berón arribó a la octava década y la celebró con una reunión en su propia casa, donde intervinieron para organizarla su esposa e hijos. El catering estuvo a cargo de Marcela Sánchez Bustos y su hijo, Diego Vega, con una mesa dulce a cargo de Cristina Leániz para cerca de un centenar de invitados. Reginaldo es técnico químico y farmacéutico, egresando de la Universidad de Córdoba como bioquímico en 1957. Está casado con Elsa Argenis Güidi (77), Maestra Normal; con quien comparte cincuenta y dos años de casados y tienen cinco hijos: Graciela (51), licenciada en Ciencias de la Alimentación y casada con Rolando Chicala y tres hijos, Emiliano, Juan Diego y Franco. Le sigue, Eduardo (50), bioquímico, casado con Virginia Aguilar y tres hijos, Eduardo, Santiago y Ana Paula. La tercera es Analía (44), arquitecta casada con Alberto Guerrero y una hija, Josefina. Sigue Mariela (43), abogada casada con Javier Martín y tres hijos, Tadeo, Francisco y Lourdes. Por último, Sergio (37), médico cirujano y endoscopista, casado con Milva Roberti y dos hijos, Antonella y Lucrecia. Sus hijos, lo describen como muy dedicado a su familia. Su afición, además del trabajo, la carpintería, lectura e internet. Una amiga, Marta Bustos de Torcivia, le dedicó una frase por demás significativa: "Caminando por la vida con su laboratorio en la frente, que lo supo definir como un gran bioquímico laborioso y madrugador. Cómo no imitar un ejemplo así". Reginaldo se jubiló como jefe del Servicio de Laboratorio en el Hospital Rawson, cargo que detentó durante treinta y nueve años. Fue también presidente del Colegio Bioquímico de San Juan y cuenta ya cincuenta y cinco años en la profesión, manteniendo actividad en su laboratorio.