El aumento de la productividad por hectárea, un mejor manejo de los costos y el uso eficiente de un agua de riego cada vez más escasa han obligado a los agricultores a incorporar el riego por goteo y todo el paquete tecnológico adjunto a esta práctica.
El ingeniero José Molina Usín de la Cámara Vitícola de San Juan consignó que "desde los años 80 se viene utilizando este tipo de práctica en la viticultura local y es una tendencia que se acentúa".
Actualmente según el censo Vitícola 2011 del INV, hay unas 8.656 hectáreas con riego por goteo y 433 con riego por aspersión totalizando en la provincia y para todo tipo de variedades.
Por su parte el coordinador regional del programa Proviar, Marcelo Rodríguez comentó: "nosotros hemos financiado ya 89 equipos de riego en todo San Juan, para unas 900 hectáreas de vid con diferentes destinos productivos".
Claro está que el uso de fertilizantes líquidos va en aumento y en la provincia la Empresa Nutriterra del Parque Industrial de Chimbas fue la pionera y ahora se suma Nutrientes SRL de Eduardo Barceló con un nueva planta en el departamento Pocito.
Pero son los productores hortícolas lo de mayor crecimiento en incorporación de este tipo de tecnología. "El uso del riego presurizado y la fertirrigación se inició hace unos 7 años atrás", comenzó comentando el ingeniero Ariel Lucero del Programa Tomate 2000, agregando: "primero hubo un aprendizaje importante y desde hace unos 4 años, el uso se hizo masivo en función de los excelentes resultados. Permite una nutrición exacta, ahorro de dinero, buenos tratamientos y duplicar los rindes en condiciones normales del cultivo".
"Hoy tomates hay unas 1.200 hectáreas alcanzadas por el programa y el 70% de las fincas cuenta con este tipo de sistema de riego y fertilización", explicó finalmente Lucero. En ajo hay unas 1.000 hectáreas, el 80% con riego presurizado.
Por su parte los hermanos Francisco y José Luis Martín indicaron que "este tipo de tecnologías permite mejorar los rindes por hectáreas y mejorar la rentabilidad, haciendo viable el cultivo de pequeñas superficies que de otra manera no sería posible".
"Nosotros comenzamos hace siete años en un pequeño cuadro de tomate de unas 4 hectáreas. Pasamos de unas 80 toneladas por hectárea con mucho esfuerzo a unas 160 toneladas. Ahora contamos con seis equipos para 32 hectáreas de diferentes cultivos".
Según comentaron desde la empresa Riego Drip, el costo promedio ronda entre los $15 y 16 mil por hectárea incluyendo los equipos según el cultivo hortícola. Costo que según los productores, se paga en un buen ciclo productivo.

