Gente que trota, otra que camina. Autos que pasan, niños que juegan, gente que grita, en un fondo de constante repiquetear de martillos. Raro, sí, pero a grandes rasgos, es la más cercana descripción de lo que fue el Parque de Mayo. Durante cinco días, siete artistas plásticos locales trabajaron obras de cobre al aire libre y en vivo, en un área del parque que da a calle Las Heras, frente al Centro Cultural Amadeo Conte Grand. Los artistas trabajaron parte de las creaciones que el 2 de junio serán expuestas en este centro y que integrarán la segunda edición de “La Noche del Cobre”.
Xstrata Copper San Juan (XCuSJ), empresa que opera El Pachón, donó el cobre con el que se realizaron las obras como parte de sus acciones para enseñar las bondades del rojo metal. La propuesta también contó con el asesoramiento de Virginia Agote, directora del Museo Provincial de Bellas Artes y del centro Conte Grand, con la intención de que esta idea sirva también para difundir la riqueza artística y cultural de San Juan.
Así, entre el golpe y golpe de martillos y cinceles, la gente pudo disfrutar de tardes diferentes, acercarse a cada uno de los autores y curiosear sobre lo que estaban haciendo. Algunos sólo miraron, otros se animaron a preguntar y muchos más fueron los que dijeron: “¿No se rompe si le pegás mucho con el martillo?”. Una interacción constante que en definitiva fue el objeto de esta puesta.
Para Estela Poggi, Coordinadora de Relaciones Comunitarias de XCuSJ, permitió transmitir el costado social de la minería. “Tratamos de continuar lo generado en la Noche del Cobre el año pasado, pero apuntando a algo más activo y por eso pensamos en el parque, para que la gente participara, pudiera venir con sus familias y disfrutar del trabajo de los artistas en vivo”, explicó Poggi.
Los autores invitados participaron de la primera edición de “La noche” el año pasado, aunque en esta oportunidad con la premisa de trabajar al aire libre. A cada uno se le proporcionó siete kilos de cobre cuya presentación dependió de la propuesta de cada uno. De esta forma, hubo grandes planchas del metal, varillas y cables, repartidos entre los diferentes artistas convocados. En esta edición de CUYO MINERO, algunas de las obras y sus respectivos autores en pleno proceso creativo.