Es una tendencia que se reafirma cada vez más. Se trata de comenzar en el mes de julio con el acondicionamiento físico. Es que, en el primer mes de la segunda mitad del año, los gimnasios aumentan la cantidad personas que buscan tener la mejor forma. Entre los motivos están el buscar una buena calidad de vida, conservar o mejorar la salud y también el verse mejor para el verano. Los interesados son de manera indistinta hombres y mujeres en una franja amplia de edad que va desde los 20 a los 60 años aproximadamente, según los especialistas. Están los que vuelven después de dejar la actividad física y deportiva durante el primer semestre del año, como aquellos que quieren tener una mejor calidad de vida y luego de varios años se animan a ponerse en forma. En todos los casos es comenzar de cero. Por eso, dos profesionales sanjuaninos, el personal trainer, Gustavo Milla y la licenciada en Nutrición, Ivana Oliveros (MP:79), hablan en Revista ¡OH! sobre los cuidados a tener en cuenta al momento de iniciar este tipo de actividades.

El personal trainer, Gustavo Milla, que entrena a destacados deportistas locales, comenta que en cualquier caso hay que hacerse un chequeo médico deportivo. En el gimnasio hay diferentes programas en los cuales incluirse de acuerdo a las necesidades. Entre ellas está por ejemplo el fitness grupal, que es muy motivador porque se trabaja con muchas personas, por ejemplo en bicicleta, aero box, entre otras. Para la gente mayor o que lleva mucho tiempo sin actividad, entre lo más recomendable está el pilates. Encaja dentro de la planificación por su flexibilidad.

El entrenamiento funcional es otro de los programas más novedosos porque se utiliza el físico con pocos elementos y dan buenos resultados. Otros programas son yoga, circuitos cardios, cintas, bicicleta, elípticos y cardio fitness que están entre los más recomendables para bajar de peso. Los programas personales son los ideales debido a que se puede planificar las distintas actividades para cada tipo de individuo. Y, si la persona interesada quiere algo más tranquilo como ir a correr al parque, puede pedir un consultor o profesor en el gimnasio. Por lo menos, una vez al mes, que le indique las rutinas adecuadas para llevar a cabo. Todos los tipos de programa duran una hora por día.

Los programas de fitness tienen que desarrollarse al menos durante 10 semanas, para ver buenos resultados. Por eso, quienes quieran hacer actividades físicas para bajar de peso y verse mejor en el verano, lo mejor es comenzar ahora y no en noviembre o diciembre, comenta el profesional.

La buena alimentación

Sin dudas que para tener un cuerpo saludable, con hacer ejercicios físicos y deportes no alcanza. Hay que tener en cuenta una alimentación adecuada para tener las energías necesarias. La consulta a un profesional nutricionista es lo más recomendable para comenzar con el proceso de desintoxicación de grasas, por ejemplo.

La licenciada en Nutrición, Ivana Oliveros, explica que cualquier individuo que desea iniciar un ejercicio físico debe primero que nada evaluar como está su salud y considerar que tipo de actividad es la más adecuada para su condición física. Es decir, si presenta alguna enfermedad debe ser el médico quien lo asesore con respecto a que tipo, duración y frecuencia puede practicar deportes, por ejemplo.

De todas maneras, dentro de las posibilidades, lo aconsejable es decidir practicar aquel ejercicio que sea del agrado personal, debido a que lo fundamental es hacerlo en forma constante, entonces si da placer realizarlo se podrá sostener en el tiempo.

Evaluación

Es recomendable evaluar el estado nutricional y condiciones físicas para poder adaptar la alimentación no sólo a la actividad que se va a emprender, si no también aportar los nutrientes y calorías necesarias ya sea para perder peso, mantenerlo o ganar masa muscular.

"Hay que pensar en la salud personal como si fuese una mesa cuyas 4 patas son: educación (conocer que nos hace bien y decidir practicarlo), control médico periódico, alimentación y actividad física. Simplemente si alguna de las patas falta, la mesa se tambalea, si faltan dos de ellas la mesa se cae", concluye la profesional.