Días atrás se llevó a cabo el lanzamiento de las Guías Técnicas sobre Fitoestabilización de Depósitos de Relaves en Chile, documentos desarrollados en el marco del proyecto Innova Chile de Corfo “Uso de Recursos Fitogenéticos Nativos para la Fitoestabilización de Relaves Mineros en la Región de Coquimbo”. Se trata de una orientación para tratar los desechos generados por las minas que cierran, a fin de no afectar el medio ambiente ni el desarrollo en las comunidades aledañas.
La jefa del proyecto y directora de la Unidad de Fitotoxicidad y Fitorremediación del CIMM, Rosanna Ginocchio, aseguró que “este es un aporte que estamos transfiriendo al sector minero para evitar que los residuos se dispersen en el medio ambiente y queden estabilizados dentro del depósito de relaves”.
La publicación consiste en cinco tomos cuyas temáticas están referidas a la metodología, aplicación sustentable de acondicionadores, flora y vegetación asociada a los relaves mineros abandonados, marco ambiental y relaves mineros abandonados, propagación de especies vegetales nativas y endémicas. En tanto, el público objetivo de estos documentos corresponde a los organismos gubernamentales con competencia ambiental, las empresas mineras, las asociaciones mineras, las empresas consultoras, ONG, académicos y público en general.
Este proyecto fue desarrollado y liderado por el CIMM, coejecutado por el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA) y apoyado por el Ministerio de Minería, el Ministerio del Medio Ambiente, el Servicio Nacional de Geología y Minería, La Empresa Nacional de Minería, la Sociedad Nacional de Minería y Anglo American.
La ceremonia de presentación de las guías estuvo encabezada por el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI) del país trasandino, Aberto Salas. También participaron el director Ejecutivo del Centro de Investigación Minera y Metalúrgica, Héctor Leiva; el director del Sernageomin, Enrique Valdivieso; y el coordinador nacional de Investigación y Desarrollo del INIA, José María Peralta.
Por parte de SONAMI, Salas manifestó que más del 95% de la alimentación que llega a una planta de concentración de minerales se descarta posteriormente como relave. “La legislación ambiental vigente -y la que pronto regulará el cierre de faenas mineras- obliga a buscar soluciones que aseguren que las obras que permanecerán en el sitio al finalizar un proyecto minero, no generarán posteriormente problemas para la salud humana, la flora, la fauna y el desarrollo de otras actividades en el entorno. En tal sentido, estas Guías de Fitoestabilización son un valioso aporte para las empresas mineras, al permitirles conocer en detalle los alcances de una tecnología que ayuda a disminuir el riesgo ambiental de los depósitos de relaves, a través de su estabilización de una manera ambientalmente sustentable y con algunas ventajas respecto de métodos alternativos”, concluyó.
(Informe: SONAMI)

