Todo comenzó con piedra, papel, tijera
y este juego de palabras
dio lugar a “Pila, papel, tapita”,
el programa que la
Cámara Minera de San
Juan lanzó en Calingasta
con el fin de promover el reciclaje
entre las escuelas del departamento.

Coordinado desde la subsede que la
institución tiene en el lugar, la iniciativa
tomó forma después de las
vacaciones de invierno y la escuela
que más junte los productos reciclables,
será la ganadora de una
computadora para su escuela o el
valor de la misma en algo que les
sea necesario (muchos establecimientos
no tienen elementos para
educación física, por ejemplo).

“Aún no hemos definido el destino
de los materiales que los chicos junten,
inicialmente se pensó en el Garrahan
pero en este momento están
sobrepasados de tapitas y papel, así
que evaluamos otras instituciones y
alternativas. Entramos en contacto
con un empresario entrerriano que

fabrica mobiliario infantil con las
tapitas que quedó en enviarnos información”,
explicó Noemí López,
coordinadora administrativa de la
CMSJ y hacedora de esta idea. En el
caso de las pilas, el destino inicial
será sumarse a la campaña gestionada
desde el Ministerio de Medio
Ambiente de la provincia.

Según Noemí, para llevar adelante
la propuesta se proveyó a las escuelas
de cajas en las cuales reciclar.

Una vez al mes y cada vez que las cajas
se llenan, deben acercarse a la
subsede de la cámara donde se acopia
el material. A fin de año se determinará
cuál es la escuela que
más aportó.

En forma paralela, la semana pasada
inició un curso de folclore para
niños y adultos. Para sorpresa de
todos, antes de empezar ya tenían
veinte inscriptos. “La actividad social
es fundamental en esta zona
porque no es mucha la oferta que
tienen para su tiempo libre, todas
las alternativas son válidas porque
la gente se suma, así que hay que debemos
generar lo que les brinde un
beneficio”, comentó López.

En cierta manera este el espíritu
de la subsede, que precisamente pretende nuclear el costado social
de las empresas que la integran.
Es el caso de Glencore a
través de la colaboración de Ma.
Eugenia Basualdo y Julia Astudillo
(El Pachón), Eduardo Buso
de Troy Resources (mina Casposo)
y Juan Aciar de Peregrine.
Esta sucursal de la CMSJ nació
en septiembre de 2011 pero recién
contó con una comisión que
la integre a partir de julio de
2012. Desde ese momento a la fecha,
se han concentrado esfuerzos
destinados a colaborar con
necesidades de la comunidad.