A simple vista: un pocillo humeante, calentito, sabroso y aromático. El que se puede preparar en cualquier casa o confitería. Pero si se indaga un poco más, el café que contiene no es el mismo de cualquier lugar. Este tiene una particularidad que lo hace diferente: no es en base al fruto del cafeto sino que está preparado con higos. Sí, con los higos de la higuera que Orlando Peláez, su inventor, cosecha de su propia finca de Angaco.
Y según quienes ya lo han catado y degustado, es verdaderamente exquisito. "Si no se sabe cuál es su materia prima, pasa por un buen café, porque el color es el mismo. Pero si uno tiene el dato que es de higos, sin lugar a dudas, le sentirá otro olor y sabor, muy agradable al paladar. Sólo es un manjar, con leche, ni qué decir”, lo describe su hacedor, quien, hace décadas, en su afán por encontrar soluciones y nuevos elementos para facilitar la vida, pensó en hacer una bebida caliente a base de los higos que se daban maravillosamente en los árboles que cultivaba.
Tardó unos años hasta lograr su cometido. Es que no sólo hizo pruebas para poder sacar el mejor provecho de los higos sino además llegó a construir la propia maquinaria para desecarlo, sometiéndolo -luego de la acción del sol- a temperaturas que superan los 300 grados centígrados. Así obtiene una preparación tostada, secada, limpia y sin microbios, lista para moler, embolsar y colocar en la cafetera.
"Es un café muy rendidor. Es tres veces más provechoso que el común. De hecho, 200 gramos rinden medio kilo. Con una cucharadita de té es suficiente porque si no sale muy cargado y concentrado”, recomienda el producto que no sólo tiene seguidores sino además consumidores que lo eligen en base a sus características, las que fueron detectadas en estudios y análisis en la Universidad Nacional de Salta. Es que para sorpresa de propios y ajenos es super sano. No tiene cafeína por supuesto y es alimenticio. Además esta bebida contiene multiples proteínas, vitaminas (C, B 6, A, E, K, tiamina, riboflavina, ácido pantoténico) y minerales como potasio, magnesio, hierro, magnesio, fósforo, calcio, entre otros. Es altamente alcalino, es energizante y equilibra la temperatura corporal. Actúa en el proceso de absorción y drenaje de los residuos tóxicos de las mucosas respiratorias, gástricas e intestinales y en el mucoedema de la piel.
Para que no queden dudas, Orlando destaca todas estas propiedades en un folleto que trae anexo cada paquete, donde además se resalta que resulta eficaz para ayudar a curar los problemas respiratorios y pulmonares, aftas bucales, gingivitis y abscesos, anemia o trastornos en la asimilación de hierro.
El higo es una fuente muy rica de benzadehyde que es un agente anticancerígeno y ligmina que es una fibra alimentaria que evita problemas de estreñimiento; contiene enzimas y flavonoides que ayudan en el proceso digestivo, facilitando la digestión suave.
Por todo esto, ¿qué más se le puede pedir a este café hecho en San Juan?

