"La idea es ayudar a diversificar al pequeño productor vitícola y hortícola con pequeña disponibilidad de tierras para cultivar" comenzó señalando Jorge Suárez, presidente de la Federación Agraria Argentina Filial San Juan junto al licenciado Daniel Páez, quien financiado por la Secretaría de Agricultura local, elaboró un número importante de proyectos de inversión que ponen a disposición de los emprendedores locales a través del asesoramiento de la entidad.

"No tenemos financiamiento pero sí ideas y proyectos y la voluntad de gestionar fondos para los proyectos" comentaron y acordaron brindar a través de Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO información sobre los proyectos que pueden realizarse en nuestros oasis.

La Alcaparra

En San Juan hubo ya esfuerzos productivos sobre ésta durante los años 80 y 90 pero sin prosperar por algunos aspectos vinculados a la falta de disponibilidad de mano de obra.

Se trata de un arbusto de origen asiático, importada por los griegos a las islas del Mar Egeo y de allí a España e Italia. Es una caparidácea de flores blancas y grandes cuyo fruto es el alcaparrón. La flor de esta planta se usa como condimento, que es la principal aplicación, así como en farmacología en múltiples aplicaciones.

Es un arbusto perenne de zonas de desérticas prácticamente sin riego. Se caracteriza por sus tallos rastreros que llegan a alcanzar 6 metros de longitud en las plantas cultivadas.

Las flores son de unos 4 centímetros y nacen en las axilas de las hojas de pétalos blancos o ligeramente rosados. Su fruto es una baya carnosa y jugosa de igual longitud y de color verde cuando es joven y algo rojizo en su madurez, conocido como alcaparrón, el que se abre dejando caer las numerosas semillas que contiene.

Clima y suelo

Se adapta a climas desérticos de entre 8 a 45 grados C*. No suele padecer plagas importantes y soporta bien el granizo y las heladas.

Se adapta bien a suelos áridos, pobres y salinos.

Para la siembra se realizan plantaciones tipo cuadrado de 2,5×2, 5 lo que demanda 1600 plantas por hectárea.

Una planta adulta llega a producir hasta 6 kilos de alcaparras por año y el rinde por hectárea puede superar los 9000 kilos.

La cosecha comienza en septiembre con un pico entre noviembre y enero y termina hacia mayo.

En cuanto a los mercados cabe aclarar que Argentina hoy importa la mayor parte de este producto generalmente desde Europa al igual que América Latina. Santiago del Estero y Catamarca tienen hoy importantes experiencias comerciales en el mercado gourmet, generalmente en conserva.