Implementar el Código Argentino para Certificación de Informes de Recursos y Reservas Minerales, es el objetivo de la recientemente conformada Comisión de Estandarización de Información Minera (COESIM), integrada entre otras entidades por el Colegio Argentino de Ingeniería de Minas (CADIM). El fin será el de consolidar el reconocimiento de la capacidad profesional de los ingenieros y geólogos argentinos en la evaluación de los recursos y reservas minerales del país, que durante el último medio siglo permitió el descubrimiento de los principales yacimientos en desarrollo y explotación en la Argentina. 
La iniciativa tiene apoyo nacional, ya que en febrero último recibió el aval de Alberto Hensel, actual secretario de Minería de la Nación, tras una reunión con el grupo y dado que este es el puntapié para incorporar al país al Comité Internacional para el Reporte de Recursos y Reservas -CRIRSCO tal sus siglas en inglés- un organismo reconocido a nivel mundial y avalado por el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM), como la entidad que representa a la industria minera en los asuntos relacionados con la clasificación y reporte de activos minerales. 

Forman parte de este sistema países como Chile, Perú, Brasil y Colombia, entre otros, y los reportes técnicos que elaboran son en base a normas consideradas por este comité. 
Según representantes del sector, hasta el momento los profesionales locales no han tenido el reconocimiento y la validación en la elaboración de la información geológica de depósitos minerales, por parte de entidades extranjeras crediticias, bursátiles y bolsas, que son las que facilitan la negociación de valores inscriptos y que sólo aceptan como valedera el sello y la firma de sus propios profesionales. 
En este marco, el propósito del código es el de disponer de una herramienta única, confiable y transparente, que garantice y certifique de manera documental, los procedimientos y metodologías aplicados a la generación de la información pública referidos a los recursos y reservas minerales del país. 

“En este sentido una de nuestras funciones será la de administrar el registro de personas calificadas (QP de quality person en inglés) de los firmantes y responsables de los informes técnicos referidos a prospección, reservas, recursos y demás, toda información que esté firmado por un QP avalado por nuestra comisión deberá además ceñirse a normas CRIRSCO que es otro de nuestros objetivos”, explicó Francisco Almenzar, actual presidente de CADIM y vice de la flamante comisión. 
Por extensión y según Almenzar, esto significará para los profesionales y en particular extranjeros, deban homologar su título a la vez de matricularse en los colegios correspondientes, para la validez de su firma en un informe técnico. De acuerdo a la fuente, ya se elevó al CRIRSCO la intención de Argentina para su incorporación a la vez de una copia del código. 
En forma paralela, la COESIM está a la espera de la obtención de su personería jurídica y en abril hay una reunión con sus miembros para seguir avanzando en el tema. Se estima que a fin de año, el país ya estará incorporado a este sistema.

¿Por qué es importante?

 

El interés de formar parte del CRIRSCO es que consta de un sistema que califica activos mineros que es aceptado por las principales bolsas mineras del mundo y se basa en recursos y reservas. Ambos tienen clasificaciones y es importante saber de qué se trata para comprender su injerencia en el mundo bursátil. Los recursos pueden ser medidos, indicados o inferidos. Se denominan recursos medidos cuando hay una gran continuidad de perforaciones, cuando esta continuidad es menos intensa se les llama recursos indicados y cuando la información es escasa, son recursos inferidos. Los recursos medidos son los que generan mayor confianza en cuanto a la continuidad de la mineralización, es decir, si se hace un sondaje en un determinado sector y hay continuidad espacial en cuanto a la presencia del mineral. Cuando a los recursos medidos se les coloca costos, como los de transporte, extracción y todo aquello de carácter económico, se habla de reservas probadas. Cuando se hace lo mismo con los recursos indicados, se habla de reservas probables. Estos dos tipos de reservas son los que fundamentan un proyecto minero financiable.