1- Alimentación variada
El organismo necesita 40 nutrientes diferentes para mantenerse sano. Ningún alimento los contiene todos, de modo que no conviene comer siempre lo mismo.
2- Consumir frutas y verduras
Las frutas, verduras y hortalizas contienen nutrientes que ayudan a prevenir enfermedades. Estos alimentos pueden ser un complemento ideal en cada una de las comidas diarias (desayuno, almuerzo, merienda y cena).
3- Higiene
No tocar alimentos sin antes lavarse las manos. Cepillar los dientes al menos dos veces al día.
4- Bebida
Es fundamental mantener el cuerpo bien hidratado, ya que más de la mitad del peso es agua. Entonces lo recomendable es consumir al menos 5 vasos de agua por día).
5- Hábitos
No intentar cambiar hábitos de alimentación y comportamiento de un día para otro. Hacerlo de a poco, marcando objetivos concretos cada día.
6- Hidratos de carbono
Para aumentar el consumo de hidratos de carbono, se debe incorporar productos elaborados a base de trigo y otros nutrientes tales como cereales de desayuno, galletas, pasta, arroz, papas y legumbres.
7- Peso adecuado a la edad
Para saber cuál es el peso correcto de un niño o adolescente, se debe tener en cuenta algunas condiciones: edad, sexo, altura, constitución, factores hereditarios, entre otros. El exceso de peso se produce cuando el cuerpo recibe más calorías de las que gasta. La grasa proporciona algunos de los nutrientes que necesita el organismo, pero también es la fuente más concentrada de calorías, por lo que hay que alternar con ingestas más ligeras.
8- Comer regularmente
El organismo necesita disponer de energía a cada instante del mismo modo que los vehículos precisan combustible para moverse. Hay que disfrutar de los alimentos sanos en el desayuno, almuerzo, merienda y cena.
9- Ejercicio
Hay que mantener músculos y huesos activos para que funcionen bien. Intenta hacer algo de ejercicio cada día.
10- No hay alimentos buenos ni malos
No hay que sentirse culpable por comer determinados alimentos. Eso sí, evitar excesos y asegurarse de que la dieta es lo bastante variada como para resultar equilibrada. Equilibrio y variedad son las claves para que la alimentación ayude a mantener una buena salud.

