Goldeneye es un nombre que ha acompañado la historia de los juegos de acción en primera persona para consola. Hace ya casi 15 años que Rare demostró que sí se podían hacer grandes juegos en primera persona para plataformas que no fueran PC. En este tiempo el género ha ido creciendo de manera generosa hasta ser el más prolífico en la presente generación. Activision decidió que tener la licencia de una obra maestra de mediados de los noventa era una oportunidad.
GoldenEye 007: Reloaded está disponible para la Xbox 360, Playstation 3 y Nintendo Wii. Se trata de nombre mítico dentro de los videojuegos por ser uno los mejores productos interactivos basados en una película que regresa a una consola Nintendo, donde vio la luz el original y de donde no salió. Esta apuesta exclusiva para Wii cumplió con las expectativas a pesar de ser una propuesta arriesgada.
Eurocom, que ya había pisado más de una vez territorio 007 con el último Quantum Solace o con el notable Nightfire, no se ha limitado a actualizar en alta definición el Goldeneye 007, sino que ha hecho un trabajo técnico algo más profundo para adaptarse a las consolas nuevas, además de contar con algunos modos de juego que no estaban en la entrega para Wii.
UNA NUEVA PERSPECTIVA DE JUEGO
El elegante Pierce Brosnan ya no es el protagonista de este Goldeneye, sino que lo es –como en las películas actuales- Daniel Craig. El cambio de protagonista es un elemento diferencial, pero no es el único. Se ha reinventado el argumento, el desarrollo y las localizaciones. Es otro juego, pero con algunas esencias de su pasado.
Al principio el jugador tendrá la sensación de estar jugando a esos clásicos emplazamientos. Se comienza en el mismo sitio que en Goldeneye de Nintendo 64, pero la cosa será distinta cuando el usuario suba a un vehículo ruso y termine en un tiroteo con sus enemigos. Más adelante, la siguiente sorpresa es un lugar más avanzado, en el que el jugador deberá asomar la cabeza por encima de unos lavabos. A medida que avance por esa zona verá que todo ha cambiado.
Reloaded tiene destellos muy claros de la obra original, pero más allá de eso es una aventura con entidad propia que se ha tomado la libertad, años después, de reescribir el juego y la película.
