Integrando todo a la unidad central de procesamiento, se reducen los tiempos de comunicación con otros componentes y se minimizan tanto el espacio como el consumo energético, todo esto manteniendo un buen rendimiento. En esta línea trabaja Intel Rosepoint, una plataforma de futuro que actualmente está siendo desarrollada y sobre la que ya se conocen algunas de sus características.

La principal es la de integrar el controlador Wi-Fi dentro del chip de la CPU. Esto sería equivalente a lo que actualmente existe con el combo de CPU+GPU de Intel Core, AMD Fusion o incluso ciertos Intel Atom modernos. La principal ventaja de esta arquitectura sería optimizar los tiempos de respuesta del chip Wi-Fi así como reducir los consumos energéticos.

Intel Rosepoint, con placa inalámbrica dentro suyo

La gran ventaja que puede sacarle Intel a Rosepoint se encuentra en las interferencias creadas por la electricidad utilizada por el propio microprocesador (al más bajo nivel, el CPU trabaja con corrientes eléctricas que pueden generar interferencias en otros dispositivos electrónicos). Intel afirma haber solucionado este aspecto y va a demostrarlo en una conferencia a lo largo de esta semana.

Intel Rosepoint, repito, es un proyecto en desarrollo cuyo lanzamiento está esperado para el año 2015. Los prototipos actuales están fabricados en 32 nanómetros y son procesadores Intel Atom de dos núcleos, aunque esperan que las versiones finales sean SoC (system on chip) integrados para su uso en ciertos dispositivos como podrían ser móviles, reproductores multimedia y demás.
+ INFO
La información relacionada con la presentación de Intel está disponible en un documento .pdf titulado “Intel Labs at ISSCC 2012” en la página web del fabricante.