Parece una historia de nunca acabar. Google es cada vez más grande y aprovecha su propia fuerza para tomar impulso y volver a crecer. Al parecer, esta empresa ha estado, desde sus inicios, destinada a asombrar. Y no sólo a sus seguidores, sino también a sus detractores. En esta oportunidad lo hace con un anuncio que viene a actualizar completamente la manera en que accedemos a internet. Se trata de un servicio denominado Google Fiber, que dará una conexión dedicada a la red y contenidos multimedia, como televisión y música, a 1 gigabit, velocidad 100 veces superior al promedio de accesos en los Estados Unidos y a precios más bajos que los de su competencia.
El secreto radica en que Google provee absolutamente todas las etapas del acceso. Esto significa que los dispositivos utilizados para conectarse son desarrollados y fabricados por la empresa. También la distribución, comercialización y hasta la fibra óptica que se utiliza son propiedad de Google.
Por ahora, sólo está disponible en Kansas City, KS – Estados Unidos-, pero pasadas las primeras pruebas la cobertura comenzaría a ampliarse.
Algunos analistas no ven nada bueno en que una sola empresa tenga tanta influencia y poder sobre todo aquello que pasa en internet. Pero por otro lado, están los que piensan que se trata de una excelente noticia porque sólo una compañía con esta visión de futuro, y unas dimensiones considerables, puede dedicar tanto capital en innovar constantemente en todas las áreas, forzando a los demás actores del mercado a actualizarse y renovar sus servicios. Al parecer, es una buena oportunidad para que los proveedores de acceso a internet se desperecen un poco y renueven la tecnología de conexión móvil y domiciliaria, tan postergada y desfasada respecto a otras áreas de las TIC.

