El final de la semana se verá alterado por la llegada del temporal de Santa Rosa, el fenómeno climático que suele ocurrir a fines de agosto y que provoca lluvias en todo el país y este año según el pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional tendrá impacto en San Juan el jueves y viernes provocando esperan lluvias y descenso de la temperatura.
Según el detalle del SMN, después de un primaveral miércoles, con temperaturas de 19°C, el jueves cambiará abruptamente el clima, con altas probabilidades de lluvias aisladas durante el día y una máxima de 13°C, con mínima de 8°C , con viento del sur con ráfagas de entre 40 y 50 km/h.
En tanto que el viernes, continuará el mal clima, con lluvias aisladas por la mañana y lloviznas en la tarde noche; con máxima de 13°C y la mínima de 6°C. El viento será del sector sur, con más intensidad por la mañana, de entre 23 a 31 km/hr, disminuyendo por la tarde a 13 a 22 km.
Por qué se llama Tormenta de Santa Rosa
La tormenta de Santa Rosa está caracterizada por lluvias intensas y aunque históricamente se la espera hacia fines de agosto, sin embargo, pero se puede adelantar o mismo atrasar unos 15 días.
La tormenta de Santa Rosa adquirió su nombre particular En honor de Santa Rosa de Lima, la Patrona del Perú y América. Su relación tiene que ver con que suele caer cerca de la fecha en que se celebra el día de esta santa y tiene una cercana correlación con el milagro que se le atribuye a la Patrona de América. Según la creencia, esta mujer protegió a la capital peruana de un ataque naval de piratas holandeses. Tras rezar en la Iglesia Nuestra Señora del Rosario de Lima, se desató una tormenta que impidió el desembarco.
El Día de Santa Rosa de Lima ya pasó, puesto que se celebra el 23 de agosto. De todos modos, en algunos lugares se festeja el día 30. Esto se debe a un cambio en el calendario que llevó adelante la Iglesia. Esta figura murió 24 de agosto de 1617, que coincide con las fiestas de San Bartolomé. Por lo tanto, se decidió en su momento otorgarle como fecha de conmemoración el 30 de agosto tras su canonización por parte del Papa Clemente X. De todos modos, en 1969 se reordenó el calendario litúrgico tras el Concilio Vaticano II. En ese contexto, se definió correr la celebración de Santa Rosa al 23 de agosto, una jornada que está más cerca al aniversario de su fallecimiento.