Un ambiente enrarecido quedó anoche en Boca tras la nueva derrota. El presidente Jorge Ameal fue hostigado con piedras e insultos, a tal extremo que tuvo que dejar su lugar en el palco veinte minutos antes de que concluyera el partido. Por otra parte, desde el tercer piso del estadio se arrojó una barra de hielo que rompió el parabrisas del auto de un dirigente. Ya con el resultado consumado el entrenador Abel Alves suspendió por primera vez la conferencia de prensa.
