Las paredes de adobe de los ranchos parece que se vienen abajo cada vez que pasa un camión. Es que la velocidad con la que transitan la calle 4, a la altura de Villa Cariño, en 25 de Mayo, hace que el suelo se mueva como si hubiera un temblor. Los vecinos viven con miedo, sobre todo cuando los chicos juegan en la puerta de las casas. Por eso, pidieron que les hagan bicisendas y pongan reductores de velocidad. Leonardo Saavedra, secretario de Gobierno del municipio, dijo que están trabajando con Tránsito y Transporte para determinar qué medida tomar en la zona.

La villa está ubicada por calle 4 entre Ruta 20 y calle 25 de Mayo. Y es muy transitada por camiones de carga que cortan camino para llegar a Mendoza. Van por calle 4 hasta la Ruta 270 y ahí llegan hasta el departamento Sarmiento, donde toman la Ruta 40.

Además de la velocidad con la que transitan los camiones, el ancho de la calle 4 es otro problema. Es que es tan angosta que cuando vienen dos vehículos enfrentados, deben acercarse a la orilla lo más posible porque casi no tienen espacio suficiente para pasar. Sumado a esto, no hay banquinas para que la gente camine, por eso lo hacen por el asfalto. Ante esto, Daniel Riveros, el presidente de la unión vecinal de la villa, que está a unos 10 kilómetros de Santa Rosa, dijo que en 2010 presentaron una nota a la Municipalidad pidiendo reductores. En esa oportunidad, solicitaron también que hagan bicisendas porque toda la gente de la zona usa este medio de transporte para ir a trabajar o para llegar hasta la escuela más cercana, que está a 2km. Pero no tuvieron respuestas y el peligro continúa. Y si bien nunca hubo un accidente grave, varias personas cayeron de sus bicicletas para evitar ser atropelladas.

Si bien los camiones son los que más rápido transitan, los vehículos particulares también influyen para que la calle sea peligrosa. Sobre todo los domingos, cuando mucha gente visita el cementerio municipal que está frente a la Villa Cariño. Por este peligro, los padres casi no dejan salir a sus hijos a jugar a un nuevo playón que tienen. ‘Se les escapa la pelota y ellos corren detrás sin medir las consecuencias‘, dijo Braulio Molina, otro vecino.

Ante esto, Saavedra dijo que una de las alternativas que están evaluando es poner cartelería para que los camiones disminuyan la velocidad. “El intendente Rolando Quiroga está manteniendo reuniones con Tránsito y Transporte para definir una posible solución. No sólo para la Villa Cariño, sino para varios asentamientos que sufren el mismo problema”, dijo.