El vandalismo no le da tregua a la Plaza Hipólito Yrigoyen, más conocida popularmente como ‘plaza de la joroba’. Los ataques llegaron a tal punto que pasó a mostrar la peor imagen en los últimos tiempos. Ni los juegos infantiles se salvaron de las pintadas con aerosol. Frente a este panorama, el municipio analiza la posibilidad de instalar cámaras para monitorear en forma permanente este paseo en el que se realizan diferentes actividades culturales, artísticas y turísticas.
‘Esto es de nunca acabar, los reparaciones duran menos de 24 horas’, dijo uno de los empleados municipales que comenzaron a pintar las instalaciones de la plaza para eliminar los grafitis. Dijo que el domingo pasado volvieron a pintar de blanco los muros de la escalinata que lleva a la montaña y ayer ya amanecieron pintarrajeados con pintura negra. Esta vez, los malvivientes hasta hicieron rayones con aerosol de diferentes colores en el piso de ese sector.
La parte más afectada por el vandalismo, y la que más impacta a la visual, es el anfiteatro con el escenario que se ubica sobre la fuente. En este sector, utilizado para eventos organizados por el municipio y diferentes instituciones de Capital, todos los muros están cubiertos con grafitis, dibujos, frases y hasta palabras obscenas. Esa misma imagen se repite en los basureros, en los cuatro kioscos que hay en la plaza, en los bancos, en los carteles, en las torres solares, en la base del mástil de la Bandera, en el busto del expresidente argentino, Raúl Alfonsín, y hasta en los juegos infantiles. A esto
se suma la rotura de placas de mármol y de la alta estructura de lona que promociona una de las ferias municipales.
Darío Molina, secretario de Ambiente y Servicios de Capital, dijo que hace tres o cuatro meses que realizaron trabajos de refacción en esta plaza para eliminar los pintadas con aerosol, pero que a los pocos días volvieron los ataques. ‘Esto es un verdadero daño a un espacio verde muy utilizado por las familias. Durante la mañana y la tarde noche hay placeros que se encargan del mantenimiento y de la seguridad en la plaza, pero los ataques ocurren en la noche y madrugada cuando los placeros se retiran y hay poco movimiento de gente. Por eso estamos analizando algunas opciones para frenar el vandalismo’, dijo Molina. El funcionario dijo que se está estudiando la posibilidad que haya placeros las 24 horas del día y hasta de instalar cámaras de seguridad para un monitoreo permanente del lugar. Mientras tanto apeló a la colaboración de los vecinos para que llamen al 911 si detecta a los malvivientes destruyendo las instalaciones.
Agregó que en esta plaza también se reparará la fuente central, se renovará el piso y se mejorará la iluminación en el sector del anfiteatro.