
Un emprendimiento olivícola ubicado en el departamento Rivadavia fue denunciado por vecinos de la zona como consecuencia del fuerte olor que emanaba del predio en el que se encuentra la plantación de olivos.
Al concretar la inspección por parte de la Dirección de Gestión de Ambiental, los expertos corroboraron que el olor provenía del estiércol de gallina utilizado como abono para los olivos.
Ante esta situación, la Secretaría de Ambiente labró un acta de infracción (puesta a disposición), por infringir el Código de Faltas de la provincia, Ley 941-R.
En este caso, las emanaciones de gases podrán ser sancionados, conjunta o alternativamente, con pena de multa de treinta (30 J) a mil jus (1.000 J), trabajos de utilidad pública y/o arresto de cinco (5) a treinta (30) días.
