San Juan, 27 de diciembre.- Eran cerca de las 16.30 cuando la creciente comenzó a bajar por la Quebrada de Maradona, en Rivadavia, y causó temor en los empleados del municipio que temieron que barro ganara espacio e ingresara al camping municipal que estaba repleto de gente.
Aunque la situación no pasó a mayores, sí se debió evacuar a todas las personas que disfrutaban de la tarde frente al Autódromo Eduardo Copello. El agua inundó el predio, pero después gracias a una compuerta comenzó a desviarse rumbo al Dique de Ullum.
